La Agrupación de Amigos del MARCO se da un mes para elegir a los responsables que dirigirán esta nueva etapa de desencuentro con el gobierno local por el cambio de modelo que se está aplicando al hasta ahora museo de arte contemporáneo de Vigo. La actual presidenta, Daniela Sarraíno, anunció en los últimos días su intención de dejar el cargo y ayer se celebró una numerosa asamblea extraordinaria a la que acudieron alrededor de 80 personas y en la que se decidió aplazar unas semanas la elección de sustituto. Ayer surgieron ya varios nombres de voluntarios dispuestos a asumir las riendas, pero se analizará con calma hasta marzo si se opta por un presidente único o se opta por una especie de comité de dirección.

"Nos concedemos un impasse para dar con la mejor solución. El compromiso que asumimos es que ninguno de los socios se va a dar de baja por ahora", explicó Sarraíno a la salida del encuentro, convocado para decidir sustituto y evaluar los cambios en la programación confirmados esta semana.

Respecto a la apertura del MARCO a todo tipo de estilos artísticos, la agrupación lo tiene claro y se muestra contraria. "Estamos en total desacuerdo. Hubo unanimidad al respecto porque creemos que tiene futuro como museo de arte contemporáneo aún dispuestos a su transformación y a realizar cambios", señala la todavía presidenta de la entidad, que reprocha al gobierno vigués que no se aceptara su solicitud de entrevista cursada "ya en septiembre" y después de llamar varias veces al Concello.

"Nos sentimos pisoteados y no reconocidos pese a que realizamos contribuciones económicas anualmente al museo", señala la responsable de un colectivo que agrupa a más de 400 particulares y artistas "amigos" del MARCO, centro que quieren conservar "abierto al cine, la música y la pintura contemporánea como hasta ahora", señalando que las cifras lo sitúan como el más visitado de la ciudad.

No entran en la calidad de las propuestas realizadas, pero censuran el "cambio radical de modelo de gestión" y señalan que lo que más le preocupa en estos momentos es "la falta de independencia a la hora de elaborar la programación", un aspecto para ellos "clave" que no ven garantizado. Seguirán reclamando una reunión con responsables municipales.