Como se preveía, el fenómeno de las cláusulas suelo en Vigo ya supera al de preferentes, que sumó 2.700 demandas en un período de poco más de dos años. En el caso de las de suelo hipotecario, en solo ocho meses ya van casi 3.300. Y la cifra sigue al alza. Ante este aluvión, una nueva magistrada se incorporó esta semana para ayudar a resolver estos asuntos. La medida fue autorizada después de que el juez decano, Germán Serrano, formulara la petición, que fue abordada en Sala de Gobierno en el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG), recibiendo el visto bueno.
La sentencia europea sobre cláusulas suelo llevó a crear en la ciudad un juzgado de refuerzo especializado en la materia, el que está ubicado en el Casco Vello. Entre el 1 de junio y el 31 de diciembre el tribunal registró la friolera de 2.917 casos. Ante esta situación y tras un acuerdo del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) se decidió que esta sala dejase de recibir asuntos, para que pueda resolver todos los que acumuló en 2017.
Así, desde el 1 de enero los nuevos casos de suelo hipotecario entran todos en el Juzgado de Primera Instancia número 14 de la ciudad, del que depende el de refuerzo. Y esta sala, desde este miércoles, cuenta además con una magistrada de apoyo para resolver este tipo de pleitos. Se trata de una juez de adscripción territorial (JAT) que hasta el pasado 31 de diciembre sustituía al titular del Juzgado de Primera Instancia número 11 de Vigo. Dado que el magistrado propietario de esa plaza se reincorporó a la misma, el decano vigués pidió, y así fue concedido, que la juez realizase labores de apoyo con los litigios de suelo hipotecario.
De esta forma, son tres los magistrados que en la actualidad se dedican a esta materia bancaria. En lo que va de año ya se registraron 375 asuntos y se prevé que por el momento el número de demandas continúe siendo elevado. Los jueces están dando la razón de forma mayoritaria a los afectados.
