"Fue una de las personalidades más prestigiosas personalidades de la ciudad". Esa frase se puede leer en la información que el Decano dedicó al fallecimiento de Manuel Bárcena y Franco, conde de Torrecedeira. Estaba enfermo desde hacía dos semanas, pero nada había presagiar este desenlace. El político y también empresario se había convertido con el paso de los años en una referencia inevitable en Vigo, ciudad a la que dedicó grandes esfuerzos. Impulsó numerosas iniciativas, todas ellas con el objetivo de mejorar la calidad de vida de los ciudadanos.
Le otorgaron el título de Conde de Torrecedeira en 1891. De alguna forma se reconocía el compromiso con Vigo y su trabajo. Manuel Bárcena llegó a ser alcalde de la ciudad y bajo su mandato se desarrolló todo el proyecto de la Alameda. Fue el primer regidor municipal que se atrevió a pedir un préstamo para realizar las obras. Parte del dinero también se invirtió en construir escuelas. La más prestigiosa y significativa fue la que se instaló en el Arenal.
Su especial carisma y visión de futuro le llevaron a ser uno de los fundadores de la Caja de Ahorros Municipal de Vigo, una entidad por la que sintió una gran pasión. Tanto que su casa llegó a albergar la sede de la institución bancaria durante varios años. También fue el promotor de la Cámara de Comercio de Vigo, desde la que desarrolló numerosos proyectos. La actividad de esta entidad era frenética, sobre todo en defender los intereses de la ciudad. Las cartas reclamando mejoras eran insistentes y constantes. No se dudaba en reclamar al Gobierno o a cualquier empresa pública la realización de obras y promover inversiones. En sus primeros años logró conquistas históricas, como la ampliación del puerto en una época muy compleja.
Manuel Bárcena Franco perteneció al partido progresista y llegó a ser vicepresidente de la Junta Revolucionaria de Vigo. Mantuvo también una intensa trayectoria política, aunque no abandonó su faceta empresarial. Creó una fábrica de conservas y también fomentó la Tertulia Recreativa, una entidad que fundó y se convirtió en presidente. Había estudiado en Inglaterra y su formación era de alta escuela, según las referencias de la época. Construyó un edificio en el centro de la ciudad, al margen de otros en diversos lugares, que se convirtió en una referencia arquitectónica por su diseño. Allí residió con su esposa y los cuatro hijos del matrimonio.
El Decano publicó durante tres días de forma consecutiva una esquela. En la misma figuraban algunos de los cargos que llegó a ocupar. Cónsul de Alemania y Rusia, vicecónsul de Dinamarca e Inglaterra, distinguido con la Gran Cruz de Isabel la Católica y Comendador de la Real Orden del Cristo Militar de Portugal, eran algunas de las referencias.
Su cuerpo fue velado durante dos días en su casa. Su entierro se realizó en Pereiró. Al mismo acudieron miles de personas y numerosas autoridades provinciales. Ese día, la ciudad estaba de luto.
