Los arquitectos de Vigo recurren el contrato de redacción de la reforma de las gradas de Gol y Marcador y la construcción de un aparcamiento subterráneo anexo a Balaídos por entender que fija a los aspirantes unas condiciones económicas y técnicas "arbitrarias" y que infringe varios artículos de la Ley de Contratos del Sector Público al exigir la petición de un equipo mínimo de técnicos dedicado al proyecto. La delegación viguesa del Colegio Oficial de Arquitectos de Galicia (COAG) remitió sus alegaciones al Concello el pasado 18 de diciembre y presentó recurso especial en materia de contratación ante el Tribunal Administrativo Central de Recursos Contractuales para que paralice el expediente y se modifiquen los pliegos de cláusulas administrativas particulares. El órgano dependiente del Ministerio de Hacienda aún no resolvió si estima o no el recurso. Si lo hace, el contrato al que se podían presentar ofertas hasta el pasado 3 de enero y que cuenta con un presupuesto de 899.924 euros, quedaría automáticamente paralizado hasta que se evalúen los requisitos impugnados.

Los arquitectos defienden que el pliego económico y el de prescripciones técnicas "no se ajustan a derecho, infringen los principios generales que han de regir la contratación pública y lesionan los intereses profesionales legítimos y directos del colectivo". En ello fundamentan la presentación de un recurso especial en materia de contratación que cuestiona en primer término las exigencias a los contratistas para demostrar su solvencia financiera y técnica.

El gobierno local pide a los aspirantes un volumen de facturación en los últimos tres años igual o superior al precio del contrato, un requisito "difícil" de cumplir para algunos profesionales debido a los años de crisis que arrastra el sector, que pide que se admita como medio de acreditación alternativo tener concertado un seguro de indemnización por riesgos profesionales o el compromiso vinculante de suscribirlo en caso de asumir la obra con el fin de "favorecer la concurrencia".

Respecto a la acreditación técnica, la exigencia de experiencia en trabajos de igual o similar naturaleza haciendo mención específica a la construcción de obra civil y la edificación de instalaciones deportivas o infraestructuras para la celebración de espectáculos, es considerada por los representantes del COAG un exceso sobre lo previsto en la normativa que "limita injustificadamente la libre concurrencia e infringe el principio de igualdad, pudiendo dejar fuera a profesionales plenamente capaces y solventes". Los arquitectos también cuestionan la petición de un equipo técnico con una composición y requisitos mínimos por "restrictivo y desproporcionado". "Las exigencias en número y experiencia de los técnicos es totalmente arbitraria y no se soporta ni en la legalidad ni en la complejidad del proyecto", fundamentan en su recurso, que echa en falta, por el contrario, que no se exija al director de los trabajos una titulación profesional habilitante. Por último, impugnan la cláusula que determina que los autores ceden los derechos de su trabajo al Concello de forma exclusiva al considerarla "nula por abusiva".

Fue el PP de Vigo el que ayer dio la voz de alarma ante la posibilidad de que este recurso implique un nuevo retraso en la reforma del municipal de Balaídos. El edil Miguel Fidalgo denunció los "sobrecostes" de la obra y que "no se sepa cuándo va a terminar". Sin embargo, el alcalde, Abel Caballero, incidió en que "lo más importante es que la obra se hará lo antes posible", recordando que la pagarán íntegramente Concello y Diputación y que la Xunta "no aporta nada".