El área quirúrgica del Hospital Álvaro Cunqueiro contará a finales de primavera con una resolutiva y novedosa tecnología que permitirá una mayor precisión en las intervenciones, una monitorización más completa del paciente y reducir el número de controles o pruebas postoperatorias, al detectar cualquier problema durante la propia cirugía. Se trata del primer TAC de alta resolución quirúrgica, técnica de adquisición de imagen con cortes circulares que favorecerá una mejora de la seguridad del paciente durante las operaciones.

¿Cuál es el beneficio último de esta nueva técnica frente a los intensificadores en 3D más sofisticados? Por un lado, reducir el número de futuras pruebas, controles o comprobaciones "ya que obtendremos estas informaciones en tiempo real en el quirófano", explica el doctor Cesáreo Conde, jefe de Neurocirugía del hospital de Beade. En este sentido, también se realizarán intervenciones mucho más "precisas". "Durante la operación tenemos la certeza de cómo están las cosas, podemos solucionarlo sin tener que volver a meter al paciente en el quirófano", matiza Conde. "Si vamos a hacer una biopsia cerebral y tenemos ya al paciente en el quirófano, podemos hacerle ahí el scanner para planificar la biopsia con el paciente ya en la posición exacta y no como lo veíamos hace 48 horas o incluso si hacemos una implantación de un tornillo podemos observar durante la cirugía si hay algún problema con la colocación de los implantes y asegurarnos de que todo esté en su sitio", añade el facultativo.

Este TAC de alta resolución para quirófanos también aporta informaciones complementarias sobre la intervención del paciente, como por ejemplo, un estudio vascular que permitirá detectar si algún vaso sanguíneo está obstruido. "De este modo se aumenta mucho la seguridad y la eficacia en nuestra cirugía y consecuentemente el tratamiento a los usuarios", sostiene Cesáreo Conde. El Hospital Álvaro Cunqueiro será el primer centro gallego que cuente con esta tecnología si bien, como precisa el doctor Conde "sí hay resonancias magnéticas intraoperatorias en otros hospitales del país".

Detrás de la demanda y la adquisición de esta nueva tecnología se encuentra el servicio de Neurocirugía aunque su uso no es exclusivo; el sofisticado equipo también será empleado por otras unidades asistenciales como por ejemplo Traumatología. Se espera que tras la adjudicación del concurso público, abierto este pasado martes por un importe de 702.405 euros, esté operativo a finales de primavera de este año.