El nuevo mapa escolar que planea distribuir la ciudad y centros de enseñanza en cuatro grandes áreas podría entrar en vigor el próximo curso. Para ello, el boceto de este proyecto debería estar concluido a finales de este año o principios del 2018. Ante la proximidad de los plazos, desde Foanpas, colectivo que agrupa a las madres y padres de los escolares vigueses, han reivindicado su derecho a ser "escuchados" por Inspección Educativa a la hora de elaborar este proyecto.

Según explican en un comunicado que trasladaron también a la Jefatura Territorial, lamentan que todavía no han sido convocado a una reunión para conocer el boceto ni tienen información "alguna" sobre el mismo. En el comunicado dirigido también a los inspectores educativos de la ciudad, miembros de Foanpas explican que este primer borrador debe realizarse "con un criterio rigurosamente científico y técnico" y perseguir "la mejora del sistema educativo y la calidad de la enseñanza". Por ello demandan también que no haya "intereses arbitrarios" a la hora de confeccionar este nuevo mapa escolar. "Este proyecto debe velar por el cumplimiento de las condiciones básicas que garanticen la igualdad de todos los ciudadanos, opten por una educación pública o privada", recoge el escrito emitido por la Federación olívica.

Este nuevo mapa escolar responde a la necesidad de actualidad a la "anticuada" y "obsoleta" zonificación. El modelo en el que se trabaja permitiría reducir los desplazamientos del alumnado hasta los institutos que por zona les corresponderían y también captar mayor estudiantado en la periferia