El Concello esperará hasta después del periodo navideño para cortar y reformar la Plaza de Compostela y su prolongación, García Olloqui. Las obras para eliminar el adoquinado y sustituirlo por otro pavimento comenzarán en los próximos días, pero serán trabajos menores. Según fuentes municipales, será a partir del 8 de enero cuando entre la maquinaria pesada y, por lo tanto, se tendrá que cortar la circulación rodada. A priori, el corte se prolongará durante cinco meses, que es el plazo de ejecución que tiene la obra. En las próximas semanas las Concejalías de Tráfico y Fomento afinarán el plan de circulación y desvíos para tratar de reducir al máximo los problemas que se prevén al quedar "anulada" una de las dos calles del corazón urbano.

El gobierno local aprobó ayer la adjudicación a Civis Global por más de 1,2 millones de euros esta "rehumanización", como la calificó el alcalde. "Consiste en retomar aquella tan mal hecha humanización del gobierno anterior y cambiar todo el pavimento y hacerlo flexible para acabar con el ruido y hacer un planteamiento acorde con que sea de preferencia de peatones", dijo.

Para ello será preciso levantar todo el empedrado. El gobierno local se vio obligado a ejecutar esta actuación por orden judicial. Y es que la denuncia de varios vecinos por los ruidos y las vibraciones en sus viviendas debido al paso de vehículos por los adoquines en mal estado llevo al juez a ordenar al Concello que tomara medidas paliativas. Finalmente, y tras varios estudios, optó por lo que Caballero ha calificado de "rehumanización".

El asfalto que sustituirá a los adoquines será incluso más elástico del que se utiliza habitualmente, lo que contribuirá a reducir los ruidos. Si bien es cierto que la citada sentencia solo obligaba al gobierno local a actuar en García Olloqui, el Concello decidió extender la actuación a todo el entorno. Pero no solo se trabajará en el asfalto, también se cambiará el mobiliario urbano, se mejorarán las aceras y se elevarán ocho pasos de peatones para que la zona sea más segura para los viandantes.

Según el plan de obras, durante el primer mes se realizarán actuaciones previas y desmontajes que no afectarán al tráfico rodado. Luego, durante 60 días a partir de enero se procederá a las demoliciones y, una vez terminadas, se emplearán otros 90 para reforzar y cambiar el pavimento. El Concello cuenta con la autorización de la Dirección General de Patrimonio Cultural -la calle se encuentra dentro del yacimiento del Casco Vello- y, a priori, no será preciso realizar controles arqueológicos al no estar previstas excavaciones más allá de 70 centímetros de profundidad.

Nuevas humanizaciones

Por otra parte, el alcalde anunció ayer también que el gobierno local dio luz verde a la contratación de las obras de humanización de la primera fase de Purificación Saavedra por un importe superior a los 300.000 euros y con un plazo de ejecución de cinco meses. Se aprobaron los pliegos de cláusulas y se abre el proceso de licitación.

También se validó el proyecto de humanización de la avenida Atlántida por un importe de casi medio millón de euros y un plazo de ejecución estimado de tres meses. Según destacó el regidor olívico, estas tres obras suman dos millones de euros de inversión municipal, "más que todas las humanizaciones que hicieron muchos gobiernos durante cuatro años", aseguró.