La Casa do Patín, por la que los vecinos de Bouzas esperaron casi cuatro décadas, abrió sus puertas el pasado mes de mayo con un asunto sin resolver. El Concello de Vigo tuvo que recurrir a la expropiación para rehabilitar uno de los inmuebles más antiguos de Vigo junto a la Casa de Arines del Casco Vello y presupuestó para este fin un total de 504.000 euros. Sin embargo los técnicos municipales no estaban de acuerdo con el precio que el Jurado de Expropiación de Galicia fijó para las fincas número 5 y 7 de la actuación y recurrió las tasaciones que fijaban el precio de la primera en 102.301 euros y, el de la segunda, en 131.805 euros.
El Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG) acaba de resolver ambos contenciosos y da la razón a la administración local anulando el acto administrativo recurrido y declarando en ambos casos "no conforme a derecho" la valoración impuesta. Ordena atender las tasaciones presentadas por la Gerencia Municipal de Urbanismo, que llegó a un acuerdo con los propietarios y ya abonó el medio millón de euros mencionado.
El Jurado de Expropiación valoró en 2014 que se trataba de suelo urbanizado sometido a actuaciones de reforma o renovación de la urbanización considerando, en el caso de la finca número 5, una edificabilidad media de 1,538 m2/m2. Sin embargo, el Concello alegó que no se debían considerar los usos y edificabilidades atribuidos por la ordenación en su situación de origen, sino atender al estado actual de "ruina física y que no tiene asignada edificabilidad". El argumento es el mismo para los dos terrenos y la magistrada de la sección 3 del TSXG da la razón al Concello en ambos casos y en los mismo términos.
La reforma de la Casa do Patín se adjudicó en 385.000 euros y permitió habilitar una oficina descentralizada de servicios municipales y una sala de lectura. El edificio cuenta con la máxima protección de la Ley de Patrimonio de Galicia.
