La ampliación de Rande encara sus últimos flecos. Tras la colocación de las últimas dovelas y la finalización de la estructura de los nuevos carriles exteriores, las constructoras encargadas de ampliar la capacidad del viaducto apuran los detalles del proyecto, colocando las farolas y barandillas, para poder realizar la prueba de carga a lo largo de la próxima semana o la siguiente, a más tardar. El objetivo de esa prueba es garantizar la solidez de la estructura. A finales de la década de los 70 el viaducto -entonces recién finalizado- ya se sometió a un testeo similar, que dejó la impresionante imagen de decenas de camiones repletos de carga amontonados sobre el puente.

Como ya avanzó FARO, el objetivo de Audasa es poder abrir los nuevos carriles al tráfico antes de que empiece 2018. De ese modo la concesionaria podría beneficiarse ya a principios del próximo año de la subida extraordinaria del 1% contemplada en el convenio firmado con Fomento para la ampliación del puente. En ese acuerdo se especifica que esa alza solo se podrá aplicar a partir del enero siguiente a la culminación de los trabajos. A ese porcentaje debe añadirse, entre otros factores, la actualización anual que fije Fomento. Fuentes sindicales estiman que la subida total del gravamen rondará el 3%.