Faro de Vigo

Faro de Vigo

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Indignación empresarial por la inacción de Sanidad ante la fuga masiva de carga a Leixões

Al año de denunciar "intolerables" trabas a las importaciones, la decepción empresarial con las mejoras ideadas por Sanidad es mayúscula - Entretanto se desvían a Leixões unas 100.000 toneladas al año

Camiones conectados ayer a los muelles de carga del PIF de Vigo para la inspección de sus contenedores. // FdV

Desde la esperpéntica retención de contenedores con gambón austral por tinta ilegible en su documentación denunciada por Conxemar en septiembre de 2016, la Autoridad Portuaria mantuvo intacta su confianza en el compromiso del Ministerio de Sanidad de eliminar el enquistado tapón a las importaciones que provoca la actual gestión del Puesto de Inspección Fronterizo (PIF). Seis meses después, las mejoras anunciadas ni convencen a los operadores ni han surtido ningún efecto, pero resulta todavía más "decepcionante que se avale el funcionamiento de este puesto aduanero mientras se desvían a Portugal más de 100.000 toneladas anuales", claman. Desde las empresas cargan contra la actitud mostrada en este asunto del secretario general de Sanidad y Consumo, Javier Castrodeza, al negar lo que el Puerto define como un "hecho objetivo": que el excesivo rigor de los funcionarios de Guixar causa esa fuga de contenedores Leixões.

Por la argumentación empleada en la carta enviada esta semana al Puerto, Castrodeza defiende por "correcto" el procedimiento de los inspectores vigueses. Partiendo de esta tesis, tampoco ve motivos para impulsar comparar los PIF de ambos puertos (Vigo y Leixões) que a juicio de los operadores locales determinaría que allí los controles, sin perjuicio de la seguridad alimentaria, son más ágiles frente a los "arbitrarios" de Vigo.

Por mandato de la ministra Dolors Montserrat, recayó en su número 2 la búsqueda de soluciones a un problema que desde el principio enfocó desde una perspectiva contraria a la indicada por los empresarios locales. Centrándola en la gestión documental ideó un Protocolo de Control que todavía añadía mayor farragosidad a la ya desesperante burocracia del PIF cuando, en realidad, las asociaciones reclamaban algo mucho más sencillo que pasaría por un cambio de actitud de los inspectores o de los responsables de este puesto. A continuación se resume en siete apartados el origen de la decepción.

| La tinta de la indignación. La retención de contenedores argentinos por una cuestión nimia como la tinta desató la ira de los operadores. Alarmado por la magnitud de la polémica, el PP, por medio de su senador, Miguel Fidalgo, gestionó el encuentro entre la ministra de Sanidad, Dolors Montserrat y el presidente de Conxemar, José Luis Freire. Celebrado en enero de este año, asistieron, entre otros, el presidente del Puerto y el secretario general de Consumo. "La ministra entiende perfectamente el problema y cómo afecta a la competitividad", resumía un satisfecho Freire a la salida. Tanto fue así que en esa reunión en Madrid ordenó a Castrodeza el estudio de posibles soluciones.

| El tamaño de la fuga. Mientras se esperaban las medidas de Sanidad, el Puerto encargó una investigación para cuantificar la magnitud del desvío de mercancías a Leixões. Encargó esta misión a la consultora Eosa, que durante los siguientes meses recabó de importantes firmas de los sectores pesquero y de la industria de transformación datos que alumbran unas conclusiones demoledoras. De las 32 compañías entrevistadas -25 importadoras de pescado y 7 transitarias-, el 80% ya había huido a Leixões en el momento de la consulta atraídas, textualmente, por "el mejor funcionamiento y seguridad jurídica de su PIF". Basándose en los datos aportados por estas empresas, el informe alertaba de que la fuga se situaría al año en cerca de 6.000 contenedores (unas 115.000 toneladas).

| Cumbre en mayo. Citándolos con extrema urgencia, Castrodeza expuso a una representación de empresarios y a los presidentes de las Autoridades de Vigo y de Marín el paquete de medidas elaborado por su departamento. Se resumían en un Protocolo de Control Documental y dos auditorías, una externa para analizar los tiempos de inspección y otra de la Comisión Europea sobre los sistemas de control. Conocidas de antemano por Praza da Estrela, el presidente Enrique López Veiga logra que la medida estrella del secretario general, el citado protocolo, sea un documento abierto al que se puedan aportar modificaciones.

| "Contraprotocolo". El Puerto de Vigo creó la Mesa del Trabajo del PIF liderada por esta institución y formada por Conxemar, Anfaco, Arvi, Confederación de Empresarios (CEP), Logidigal, Ateia, Puertos del Estado y Autoridad Portuaria de Marín. De las reuniones mantenidas por este grupo desde mayo salió una propuesta de modificaciones al protocolo diseñado por Sanidad. El "contraprotocolo" que se envió a Sanidad en julio replantea por completo el del ministerio -definido como "farragoso" - con una redacción que deja la inspección de mercancías "sin margen a actitudes arbitrarias" de los inspectores. En paralelo, López Veiga presenta ante la Comisión Europea un triple requerimiento sobre la distorsión de la competencia relativa a la importación de productos de origen animal de países no comunitarios. En el fondo, esta iniciativa perseguía que en el PIF de Vigo se inspeccione con la misma metodología que en la terminal lusa.

| Demandas desoídas. Ni valora las modificaciones propuestas por la mesa de trabajo ni acepta solicitar ese estudio comparativo de los PIF de ambos puertos. Tras meses esperando su contestación, en una carta del 9 de noviembre, Javier Castrodeza, apoyándose en los resultados de las mencionadas auditorías, defiende como "correctos" los procedimientos del puesto vigués y aferrándose a un protocolo que en Vigo se tilda de "infumable", da casi por cumplida la misión que le encargó la ministra.

| El Puerto replica con un reto. Enrique López Veiga responde al secretario general con otra carta donde le traslada el "asombro" de los operadores vigueses por su escrito del 9 de noviembre porque "podría dar la impresión de que se pretende negar la realidad del desplazamiento de las descargas de pescado congelado, con destino Vigo, hacia Leixões". El dirigente portuario emplaza a Castrodeza a "negar la realidad de los hechos" al tiempo que le anuncia una "respuesta más estructurada" después una nueva reunión de la mesa de trabajo convocada para el lunes.

| Riesgo de deslocalización. Como advirtió hace meses un estudio de la Confederación de Empresarios (CEP), ya hay empresas de Vigo o que operaban en este puerto que decidieron abrir bases logísticas en Leixões espantados por las trabas del PIF de Guixar. Y este "riesgo de deslocalización" continúa, como avisa la Autoridad Portuaria. ¿Resultado? Que Portugal, por primera vez en su historia, ya presume de haber relevado a Argentina como principal exportador pesquero a Galicia.

Compartir el artículo

stats