La propuesta de ordenación provisional redactada por Urbanismo para sortear la anulación del Plan Xeral de 2008 supera la evaluación ambiental estratégica. La Consellería de Medio Ambiente remitió el viernes informe favorable al Concello aceptando la tramitación de estas normas por la vía simplificada que recorta plazos. El Ejecutivo gallego ordena realizar ajustes puntuales que el gobierno local confía en incorporar al documento en el plazo de un mes para volver a remitirlo a la Xunta y que solicite los informes preceptivos de organismos estatales que tienen tres meses para contestar. El texto volverá luego a Vigo para notificar su contenido a todos los propietarios afectados y someterlo a la aprobación del pleno. Fuentes municipales consideran viable que entre en vigor a finales del próximo verano o comienzos de otoño de 2018. "Vamos a acelerar al máximo los plazos que dependan de nosotros", apuntan desde Urbanismo.

Ninguna de las alegaciones recogidas cuestiona la ordenación planteada y solo los grupos ecologistas Verdegaia y A Ría Non se Vende se oponen a ella por entender que el texto debió tramitarse como un nuevo Plan Xeral. La Xunta solicita retirar de la ordenación provisional el ámbito de la subestación de Balaídos, el único que planteaba discrepancias y respecto al resto no prevé afecciones importantes. El Concello plantea con esta ordenación temporal el rescate de un 25% del contenido del planeamiento anulado en 2015.

El mismo día en que el informe de Medio Ambiente entraba en Praza do Rei salía hacia Santiago la propuesta de convenio para financiar al 50% la redacción del nuevo PXOM de Vigo. La Xunta aportará un máximo de 665.000 euros. El Concello prevé presentar el borrador en 2019 y que la aprobación inicial y definitiva del Plan Xeral se produzca a lo largo de 2021.