En el Museo del Mar ya está todo preparado para recibir hoy el Pergamino Vindel. Durante los últimos meses se ha acondicionado una de sus salas con un sistema que permita cumplir con las exigentes condiciones de su propietaria, la Morgan Library, y garantizar su conservación. El público no podrá contemplarlo en vivo hasta el 10 de octubre.

El valioso manuscrito, con las siete cantigas de amigo de Martín Códax, viaja en un embalaje especial que, a simple vista, no llama la atención. "Es una caja discreta", cuenta el comisario de la exposición que se ha organizado en torno al Pergamino Vindel y que incluye piezas medievales de gran calidad, Francisco Singul. Desde Nueva York voló en un asiento de cabina del avión, como lo hacen los Stradivarius y otras joyas, que no deben transportarse en bodega. Aterrizó en Madrid y los 600 kilómetros que lo separan de Vigo los recorrerá en un coche bajo importantes medidas de seguridad y siempre bajo la vigilancia de un conservador de la Morgan Library.

Singul cuenta que, siguiendo los rigurosos requisitos de la institución neoyorquina, se ha adecuado una sala interior del museo, "ni muy grande ni con techo muy alto", con un sistema que garantiza las condiciones de temperatura, humedad y luminosidad a la que debe estar la joya. Se ha realizado una inversión que se prevé seguir aprovechando en sucesivas muestras.

Tras dos o tres días de aclimatación, se abrirá la caja en la que viaja el pergamino y se introducirá en la vitrina construida ad hoc.

"Esta va a ser una exposición importante para Vigo y para toda Galicia porque no solo va a contar con el Vindel, sino con otras obras importantes", destaca su comisario. El pergamino estará acompañado de otras cuarenta piezas del siglo XII al XV, entre pinturas, documentos, esculturas, obras de madera, piezas de arqueología...