No todas las vacaciones tienen un final feliz. Los vigueses que decidieron pasar unos días en Madeira llevan días retenidos a causa del fuerte viento que ha obligado a cancelar decenas de vuelos en los últimos días. Tampoco pueden aterrizar nuevas aeronaves, aunque se espera que la situación mejore en los próximos días y las aerolíneas comiencen a operar de manera normal.
Las redes sociales se convirtieron ayer en el principal medio de queja de los afectados, que lamentaban la falta de información por parte de las compañías y las autoridades del país luso. También lo están pasando mal los familiares de las personas atrapadas en Madeira, que ven como sus seres queridos no pueden volver a casa. "El domingo les hicieron volver al aeropuerto y resulta que ya ni les dieron habitación ni nada. Están tirados", lamentaba Teresa Martínez, madre de una viguesa afectada, en declaraciones a TVE.
Las autoridades lusas ya han comenzado a asignar nuevos vuelos a las personas retenidas, aunque muchos de ellos deberán permanecer varios días en la localidad portuguesa. "Mi hija tiene un avión para Oporto para el día 13, pero sé que hay personas que lo tienen para fechas posteriores" se quejaba Martínez, reconociendo que hay numerosos usuarios que no conocen cuando podrán salir.
En Madeira están los hoteles llenos ante el aluvión de turistas retenidos. Muchos españoles acudieron ayer al consulado para pedir ayuda durante su estancia en la localidad.
El Instituto Portugués del Mar y la Atmósfera (IPMA) mantiene activa la alerta amarilla para costa sur de la isla de Madeira ante la previsión de vientos con rachas superiores a os ochenta kilómetros por hora.
