La Federación de Asociaciones de vecinos Eduardo Chao (Favec) denunció ayer la situación "extrema" por la que atraviesa el área de Bienestar Social de Vigo, sin capacidad para atender a unas 1.500 familias que demandan ayuda inmediata.

Su presidenta, María Pérez, subrayó que el personal de Bienestar Social "no da para más" y además -denunció- está sometido a situaciones de presión, pese a lo cual solo hay un vigilante para cuatro centros de atención. Ha abundado en que sigue habiendo desahucios y "cada vez son más complicados" porque la Xunta no dispone de pisos en la ciudad, mientras que Vigo no se suma al plan de viviendas vacías pese a que hay propietarios interesados. Ayer se programó además una reunión de diferentes colectivos sociales, sindicatos y particulares para presionar al Concello para que se inscriba.

Pérez criticó además la subida de impuestos para 2018, en especial el recibo del agua. Detalló además que llevan recopilados 3.900 recibos del agua y que a partir de septiembre instalarán mesas en las calles para aumentar esa cifra, para más adelante presentar una reclamación a la concesionaria Aqualia o bien por la vía judicial.