El paso adelante dado por Carlos Mouriño para llegar a un acuerdo con el Concello tranquiliza a la Federación de Peñas del Celta. Su presidente, José Méndez, considera "muy positivo" que se desbloqueen las negociaciones y respalda las peticiones del club como "razonables y nada desorbitadas". En la misma línea se muestra Cé Rodríguez, de la peña Lío en Río, quien valora el cambio de parecer del presidente del Celta. "Se ha dado cuenta de que era una situación de no retorno. La otra postura no tenía ningún sentido y celebramos que apueste por Balaídos", apunta. También desde Preferencia Celeste se congratulan de la comparecencia de Mouriño. "Fue una exposición muy positiva porque se estaba alcanzando un nivel de confrontación muy dañino para todas las partes. Ahora le toca al Concello mover ficha", señala Cristian García, presidente de la agrupación.

Lo que más preocupa a los aficionados es la construcción de un aparcamiento. "No todo el mundo puede ir al campo con dos horas de antelación y a veces hay que caminar varios kilómetros bajo la lluvia", recuerda Méndez, que entiende la exigencia del presidente de reclamar por escrito los compromisos y un mayor control sobre la reforma de las gradas que quedan. "Es lógico que se pida una mayor implicación en la reforma", valora el máximo mandatario de las peñas celestes. "Ojalá se construya un parking porque la zona en la que se encuentra el estadio tiene muy pocas plazas y es una tortura buscar un sitio", demanda José Luis Alonso, vicepresidente de Irmandiños. También lo hace Cé Rodríguez, quien los considera "primordial" para todos aquellos celtistas que se desplazan en coche.

Desde las diferentes agrupaciones creen que el movimiento de Mouriño será definitivo para que se produzca un acercamiento entre las partes. "Es hora de ir de la mano", pide Rodríguez, mientras que Méndez recomienda al presidente del Celta y Caballero "partir de cero, olvidarse de las diferencias anteriores y trabajar juntos". El deseo de este último es iniciar la temporada con la concesión de Balaídos resuelta o encaminada "para poder centrarse en exclusiva en cuestiones deportivas y evitar la división de la afición".

Otro aspecto que pone de acuerdo a las peñas es el de que el equipo no salga de Vigo. En las últimas semanas el propio Mouriño se había reunido con la alcaldesa de Mos, Nidia Arévalo, para observar algunos terrenos del municipio. Sin embargo, esa posibilidad parece ahora descartada. "El Celta es Vigo y Vigo es el Celta", señala Alonso. "No podía ir en contra de la masa social y me alegro de que haya escuchado a la afición", apunta el presidente de Lío en Río.