La Alta Velocidad Española avanza en España a marchas diferentes. Mientras Galicia espera todavía la llegada del AVE tras reiterados retrasos y Vigo aguarda aún por la salida directa por Cerdedo, aplazada ahora al menos hasta 2025, el corredor Mediterráneo tendrá un nuevo empuje inversor, según anunció ayer el Ministerio de Fomento. Íñigo de la Serna avanzó que se construirá una nueva conexión AVE entre Valencia y Castellón, que supondrá una inversión de 1.170 millones de euros y que comenzará a ejecutarse dentro de dos años, a finales de 2019.

Con la construcción de la nueva infraestructura AVE en Valencia se pretende "aumentar sustancialmente la capacidad de la vía en este tramo", según explicó De la Serna durante una visita a Castellón en la que presentó las próximas actuaciones que se llevarán a cabo en el Corredor Mediterráneo.

El nuevo AVE Valencia-Castellón será una vía doble de ancho internacional de 62 kilómetros, contará con una inversión aproximada de 1.170 millones de euros y permitirá alcanzar en este tramo una velocidad de 350 kilómetros por hora. Además, permitirá reducir a dos horas el tiempo de viaje en tren entre Barcelona y Valencia. Asimismo, rebajará a tres horas el trayecto entre Barcelona y Alicante, y a una hora y 35 minutos el recorrido entre la Ciudad Condal y Castellón.

Esta reducción de tiempo será también posible gracias a las propuestas de inversión ya programadas por el Ministerio de Fomento para instalar vías del AVE en otros tramos del Corredor Mediterráneo, como son la variante de Vandellós-Tarragona, el cambio de ancho Castellón-Vinaròs y las actuaciones entre Valencia-Xátiva-La Encina.