La nueva obra del escultor ourensano Ramón Conde preside desde ayer el acceso a hospitalización del Hospital Álvaro Cunqueiro. Bautizado como El Titán, representa al "hospital como padre protector".

Está realizado en fibra de vidrio y mide 2,4 metros de alto, 2,6 de ancho y 2,7 de fondo. La instalación se produce en la semana del segundo aniversario del complejo.