Los pasajeros de Peinador tendrán que cruzar los dedos al menos durante dos meses para que la niebla no se cuele en el aeropuerto. Éste será el tiempo que, según fuentes oficiales de Aena, la terminal olívica quedará sin sistema antiniebla por los trabajos de renovación del actual ILS. Aunque el gestor aeroportuario desconoce todavía cuándo se hará -la obra se licitó el pasado sábado- apuntan a que lo más probable es que el "apagón" se realice en 2018. "Se hará cuando menos afección tenga a la operación, tanto por meteorología como por número de operaciones", anotan.

Ésta será una de las obras de mayor magnitud que se realicen en Peinador tras la ampliación de la terminal. Y es que supone el cambio por completo del sistema ILS. El actual data del año 2004 y ha llegado al fin de su vida útil. Hace un año se realizaron varios trabajos para adecuar el aeropuerto a la normativa de seguridad europea, principalmente para convertir los elementos rígidos en frangibles para, en caso de accidentes, minimizar las consecuencias. Aquellos trabajos también obligaron a la desactivación del ILS durante varias semanas, lo que provocó decenas de desvíos y cancelaciones y obligó a miles de viajeros a aterrizar y despegar de otros aeropuertos, principalmente Lavacolla.

Esta nueva obra se licitó por 1.154.085 euros (sin IVA). Las empresas tienen hasta el próximo día 4 de julio para presentar su oferta. Antes, el 26 de este mes, finaliza también el plazo de la licitación por más de 100.000 euros para la asistencia técnica de control y vigilancia para la instalación del nuevo ILS, en esta ocasión de categoría III, la mayor que existe, y no II/III, de la que presume el actual sistema. En cualquier caso, este cambio no traerá grandes mejoras más allá de que serán equipos nuevos. "Es una renovación del sistema, pero con las mismas prestaciones. Puede haber mejoras materiales, pero que no afectan al funcionamiento y prestaciones del sistema", asegura un portavoz oficial de Aena.

Mismas obras en Asturias

El tiempo estimado de desactivación del ILS es inferior al fijado en Asturias, donde se adjudicaron los mismos trabajos que en Vigo y el tiempo estimado de "apagón" es de entre tres y cuatro meses. En cualquier caso, y al igual que se realiza siempre que se actúa sobre el ILS, una vez que esté instalado el nuevo sistema será preciso proceder a su calibración. Esta maniobra está supeditada tanto a la meteorología como a la disponibilidad del avión que se emplea para ello, por lo que el tiempo podría llegar a ser superior.

Precisamente una de las peores situaciones que se vivieron en el aeropuerto de Peinador por la desactivación del ILS fue en el año 2015 con motivo de los trabajos para adecuarlo a la normativa europea. Fue en mayo y el tiempo no acompañó. Hubo días en los que ningún avión pudo entrar en el aeropuerto, cubierto de niebla, y al final se contabilizaron 62 cancelaciones y más de 6.000 pasajeros afectados.