La Universidad de Vigo fue la primera de España en solicitar y obtener autorización de la Agencia Estatal de Seguridad Aérea (AESA) para operar drones. Y ya son varios los proyectos en los que trabaja. El más reciente, y cuyas pruebas se han realizado en las últimas semanas en Cíes, es la de LitterDrone. Se trata de un sistema piloto para la caracterización de basura marina en Europa. A través de los drones, equipados con cámaras de alta resolución, se están llevando a cabo muestreos en playas como las del Parque Nacional.

El objetivo de este proyecto Europeo, en el que además de la Universidad de Vigo trabajan también la Asociación Española de Basuras Marinas y la empresa Grafinta, es el de desarrollar un servicio para la gestión y el control de desperdicios marinos en zonas costeras. A través de los drones y los programas utilizados, se puede no solo localizar esta basura marina en zonas de difícil acceso, sino también su composición, permitiendo diseñar actuaciones de prevención y mitigación.