"No nos negaremos a pagar si estamos obligados, si la facturación es razonable y la podemos asumir; pero lo vemos injusto y abusivo dado que somos una entidad sin ánimo de lucro". Así se manifestaba ayer el presidente de la Fundación Coral Casablanca, Ignacio Pérez Amoedo, tras conocer que la SGAE instó un procedimiento judicial para reclamarles el canon por derechos de autor desde 2013. Por ahora el caso está en una fase previa a la de presentación de demanda.

"De momento no nos llegó ninguna notificación judicial", aclara Pérez Amoedo, agregando por ello que no puede entrar a valorar lo que les reclama la entidad. Pero sobre las gestiones previas a que la sociedad acudiese a la vía judicial, el presidente de la fundación explica que no fue hasta finales del pasado año cuando les llegó el requerimiento, celebrándose incluso una reunión. "Estábamos viendo la situación, valorando cómo afrontarlo, nos comprometimos a que en cuanto pudiéramos le enviaríamos la información que nos requerían", afirma.

El presidente de la fundación lamenta que la entidad no tenga "sensibilidad" con la coral. "Deberían tener en cuenta la peculiaridad de que es un coro de aficionados, de gente que no cobra por cantar y que tienen taquillas con entradas a 10 euros; es una actividad sin ánimo de lucro que difunde y perpetúa la música coral y que da educación musical gratuita a 200 niños", resume.