"Empiezo a ver un poco de luz". Enrique López Veiga acabó ayer con esa confesión su comparencia ante los medios para informar de los temas tratados en el consejo de administración al considerar que el balance de actividad de los muelles en abril difiere lo suficiente "del marzo para olvidar" para confiar en una progresiva remontada. Siguen en negativo, con una bajada del 6,5% en el tráfico total de mercancías -un 8,3% menos (más de 27.000 toneladas) en el apartado de la general- ,"pero a pesar de todos los pesares y algunos problemas todavía pendientes de resolver, es difícil que vayamos a peor. Esperamos haber tocado fondo", indicó.

"¿Hay sitio para el optimismo? Por primera vez digo sí". Y no porque de nuevo el resultado económico arroje un saldo positivo, de 76.484 euros. Veiga se muestra esperanzado en la recuperación del puerto ante la irreversible desaparición, tarde o temprano, de algunos problemas que siguen lastrando las estadísticas, como ocurrió en abril con los anuncios de huelga de la estiba que desviaron a otros puertos diez escalas de buques de Hapag-Lloyd. "Sin estas incidencias podríamos estar mucho mejor", comparó sin olvidar la espantada de importadores por las trabas en el PIF. Sin embargo, el tráfico de pesca congelada, hasta ahora derivado en masa a Portugal por esas cortapisas a la importación en Guixar, el mes pasado "remontó y fuerte" al aumentar un 28,7% pasando de 44.230 a 56.962 toneladas. Veiga atribuyó este inusual aumento al descargarse en su mayoría por la modalidad de convencional, directamente del barco al muelle, no a través de contenedores.

El comportamiento de los contenedores en abril también ofrecen al presidente otro indicio de esa ansiada recuperación al crecer el número de Teus un 0,46%. "Descendieron los llenos, pero aumentaron y mucho los vacíos. Y esto solo sucede si aquí hay unas perspectivas razonables de que se puede empezar a cargar productos, y yo quiero verlo así. Lo que indicarían que hay navieras que se están posicionando para aumentar sus volúmenes", vaticina el presidente portuario. A partir de ahora, tal vez desde este mes de mayo, López Veiga cree que el Puerto de Vigo "remontará con fuerza la intensificación de tráficos". Todo dependerá de que se resuelva el conflicto en la estiba. Por ello apeló a la "sensatez" del colectivo para alcanzar una solución "sin huelgas ni anuncios de huelgas".