Si antes lo común en los hoteles era llevarse cuanto más obsequios de la habitación mejor, ahora vivir a cuerpo de rey e irse sin pagar parece llevarse la palma. Los juzgado de la ciudad acogieron ayer dos vistas contra varios acusados de no abonar la cuenta después de varias semanas de alojamiento en dos hospedajes de la urbe. Uno de estos casos se celebró en el Juzgado de lo Penal 3 de Vigo, donde los perjudicados, según informaron fuentes próximas al caso, aceptaron una pena de seis meses de prisión por hospedarse durante más de dos semanas con sus tres hijos menores en un céntrico hostal de la ciudad, marchándose del establecimiento sin abonar los gastos de estancia que ascienden a 1.240 euros.

Por su parte, el Juzgado de lo Penal 1 también celebró una vista contra un varón que adeudó a un hotel de Vigo hasta 1.782 euros del tiempo que estuvo alojado en sus dependencias, que llegaron a las tres semanas. Al igual que el anterior, el juicio se resolvió con un acuerdo entre las partes. En ambos casos la Fiscalía solicitaba para los acusados en su escrito de acusación penas de un año de prisión por la supuesta comisión de un delito de estafa.

Comisaría

Pero estas dos situaciones no se tratan de episodios aislados. Desde la Comisaría de la Policía Nacional de Vigo reconocen que desde la calificación de estos hechos- el marcharse sin abonar los gastos de estancia- como estafa, el número de denuncias se ha incrementado, llegando a la docena el año pasado y con varias diligencias abiertas en lo que llevamos de 2017. Reconocen estas mismas fuentes que las personas muestra una "aparente solvencia" que hace que los gerentes y administradores de los hoteles no sospechen de ellos. Esta moda del 'simpa' no solo se extrapola a los hoteles: gasolineras y pequeños comercios están siendo víctimas de un repunte de esta modalidad del delito de estafa.