La brecha que ahora existe entre las calles Pizarro y San Salvador está a punto de desaparecer. El Concello aprobará hoy en Junta de Gobierno el proyecto de construcción de un ascensor de cristal ascensor de cristalpara conectar la plaza de Isabel la Católica con Pizarro evitando a los peatones subir las actuales escaleras y generando nuevos flujos entre ambos lados de una pendiente de más de siete metros de altura. La actuación se licitará por un importe de 714.000 euros e incluye tanto el elevador transparente como la transformación de todo el entorno con nueva iluminación y mobiliario.
El principal cambio previsto por el Concello es la demolición de la escalera actual, que será sustituida por otros dos tramos nuevos divididos en secciones con pendiente mucho menos pronunciada para facilitar el acceso a los peatones. El ascensor se conectará con la calle superior a través de una pasarela elevada. El plazo de ejecución de la obra es de ocho meses, por lo que podría estar lista para la próxima primavera.
El alcalde, Abel Caballero, anunció ayer el visto bueno del gobierno vigués al proyecto y explicó que incluye la retirada del Centro de Transformación de Fenosa situado ahora en la zona central de las escaleras y que afea la plaza.
Las nuevas escaleras quedarán adaptadas al talud, dando servicio a los locales laterales. "Se consigue minimizar su presencia, reduciendo el impacto visual", explican los técnicos municipales en su proyecto. La actuación se completa con la creación de una amplia superficie ajardinada "que convierte el entorno en agradable e invita en mayor medida al uso", destacan. Las escaleras dispondrán de un pavimento de granito similar en aspecto, color y acabado al existente en la plaza de Isabel la Católica.
La propuesta es realizar una estructura en vidrio tanto para el ascensor como la pasarela con la intención de interferir lo menos posible con el entorno y dar una sensación de ligereza. Se aprovechará la intervención para instalar una nueva red de pluviales.
Vigo Vertical
Esta actuación se enmarca dentro del programa "Vigo Vertical" que arrancó con las escaleras mecánicas de Abeleira Menéndez y el ascensor de Menéndez Pelayo. A este está previsto darle continuidad desde Torrecedeira a Pi y Margall con un nuevo elevador para el que el Concello espera autorización de Patrimonio de la Xunta. Caballero explicó ayer que confía en lograr los permisos para realizar las catas en verano y poder licitar el proyecto en el último trimestre del año. La Concejalía de Fomento proyecta una torre de cristal que salva un desnivel de 16 metros y planteada en la parte alta como un mirador sobre la Ría. Su licitación rondará los 1,2 millones e irá acompañada de la reforma del parque Cela.
