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¿Alguna vez sufriste acoso en la Uni?

La Unidad de Igualdad distribuye una encuesta entre estudiantes de los tres campus para elaborar un estudio sobre violencia por razón de género

¿Alguna vez sufriste acoso sexual en la Universidad? ¿Alguien te hizo comentarios groseros y ofensivos en la clase, el despacho o el laboratorio? Son algunas de las preguntas de la encuesta distribuida por la Unidad de Igualdad de la institución académica entre los alumnos de los tres campus para realizar un diagnóstico de la realidad de la institución.

La entrevista, totalmente anónima y confidencial, forma parte de un estudio para conocer la situación del acoso por razón de sexo y orientación sexual que cofinancian el Tribunal de Garantías y el Consello Social. Dicho informe forma parte del II Plan de Igualdad de la Universidad de Vigo, que estará vigente hasta 2019.

La institución viguesa aprobó a finales de 2014 un protocolo de actuación para la prevención y sanción del acoso sexual que fue elaborado por profesores del área de Derecho Procesal. Lo dirigió la catedrática Esther Pillado y también participaron los expertos Pablo Grande y Teresa Martínez.

Además la Unidad de Igualdad también realiza jornadas de formación y ha distribuido trípticos en los que explica qué señales de alarma ayudan a identificar una situación de acoso -aumento de quejas y absentismo problemas de salud- y qué hacer en el caso de producirse.

El primer paso es denunciar los hechos ante la Comisión contra el Acoso Sexual y por Razón de Sexo (CAS) de la Universidad y puede hacerlo la víctima o una tercera persona que tenga conocimiento de la situación. El límite para hacer este trámite es de tres meses desde que tenga lugar el incidente y la denuncia puede realizarse por escrito o verbalmente en cualquier registro de la Universidad o en la propia Unidad de Igualdad.

Además de contestar si alguna vez han sufrido acoso o una agresión de carácter sexual, la encuesta también se interesa por situaciones en las que los alumnos fueron tratados de forma diferente por su género, tuvieron que sufrir comentarios sexistas, o se sintieron amenazados con algún tipo de represalia por no cooperar sexualmente.

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