El constructor Carlos Rocha se sentó ayer en el banquillo del Juzgado de lo Penal 3 de Vigo acusado de un supuesto delito de estafa en el alquiler de una vivienda en Baiona. Condenado a seis meses de prisión por un delito imprudente en la red de blanqueo del clan del 'Culebra', Rocha aseguró que el denunciante le contrató para alquilar la vivienda pero cuando ya logró los inquilinos y se lo comentó al presunto afectado, a éste "no le pareció bien y me pidió que le diera todo el dinero de la fianza y del mes de alquiler", ya que quería ser él quien "negociase con el inquilino".

Por su parte, el denunciante, personado como acusación particular, afirmó en el juicio que solo le dejó las llaves del piso con la idea de que "hiciera unas reparaciones" ya que el piso se lo había vendido Rocha. "Ya me había intentado quitar antes un inquilino. Cuando de repente llegué al piso para verlo salieron dos personas que decían que Rocha les comentó que era el dueño del piso". La Fiscalía solicitaba inicialmente en su escrito de acusación dos años para el constructor.