Hosteleros de las calles Irmandiños y Martín Códax unen fuerzas para promocionar la zona. Nueve locales del entorno han decidido aliarse y lanzar una asociación desde la que organizar actividades. La futura entidad ya tiene toda la documentación preparada y está pendiente solo de inscribirse en el Concello. Su objetivo -anota André Lores, responsable de unos de los establecimientos que impulsan la asociación- es reactivar esa zona de Churruca, tomando como ejemplo el éxito que han logrado sus competidores del Casco Vello.

"Queremos que sea también una zona para salir por el día", anota Lores, quien apunta que uno de las metas con las que nace el colectivo es "fomentar" el entorno y atraer a más clientela durante el día. Para conseguirlo tienen varias ideas sobre la mesa. Entre ellas destaca lanzar una fiesta centrada en la gesta histórica que da nombre el barrio: la revuelta dos Irmandiños. Aunque aún no hay nada cerrado y Lores reconoce que de momento es solo una idea en la que trabajan, la propuesta pasaría por acoger representaciones teatrales y charlas centradas en ese episodio histórico, uno de los más conocidos de la historia gallega.

En los últimos meses algunos de los locales de Irmandiños y Martín Códax ya se unieron para organizar actividades conjuntas. En marzo, por ejemplo, celebraron una "sesión vermú" que arrancó al mediodía y en la que participaban establecimientos de la zona. La cita ofrecía diferentes "ganchos", como un mercadillo, música o incluso un campeonato de ping pong. Antes ya habían orquestado otras iniciativas similares, llegando a reunir negocios desde la calle Rogelio Abalde hasta casi Alfonso XIII; o incluso un recorrido durante el pasado Entroido con sorteos incluidos. "Quisimos ofrece algo de vida durante el día", señala Lores.

Defensa de los intereses

Además de promocionar los establecimientos e intentar diversificar la demanda, para que no se centre solo en las noches del fin de semana, la asociación quiere velar también por los intereses de la hostelería del entorno. Lores apunta por ejemplo la necesidad de replantearse la circulación de vehículos por la zona, que se semipeatonalizó tras las obras de humanización que el Concello acometió hace ya varios años. "Queremos que sea peatonal", comenta el hostelero, quien recuerda sin embargo los aparcamientos que existen en ese ámbito de Churruca.

A lo largo de la zona de Irmandiños, Martín Códax, Rogelio Abalde y Churruca se reparten diferentes negocios, buena parte de ellos dedicados a la hostelería y el ocio nocturno. La mayor parte del entonces fue humanizado en 2014, cuando el Ayuntamiento ensanchó las aceras, repuso mobiliario urbano -plantó varios olivos- y renovó el firme y las canalizaciones.