El presidente del Celta, Carlos Mouriño, anunció este viernes durante un encuentro en las redes sociales del club la marcha "irreversible" del club de la ciudad de Vigo para construir en otro municipio una ciudad deportiva que incluya también un nuevo estadio. "Hay varias posibilidades", dijo al respecto de las ofertas para comprar terrenos fuera de la ciudad un nuevo estadio que tendría un coste de unos 50 millones de euros dentro de una ciudad deportiva que calculó en 20 millones de euros. La construcción de una nueva ciudad deportiva permitiría seguir creciendo a la cantera y el nuevo estadio, además, mejoraría las condiciones para los socios, con instalaciones más "funcionales" y "cómodas", dijo. A este último respecto, aventuró que un nuevo estadio, en otro lugar, permitirá incrementar el número de abonados.

"Me gustaría como vigués permaneciese en Vigo pero es imposible", dijo Mouriño, que tan sólo dejó abierta la posibilidad de quedarse si se incluye en el nuevo Plan General un nuevo estadio. "El alcalde dijo que no se podía construir un nuevo estadio porque no estaba en el Plan Xeral. Pues muy fácil porque se está redactando uno nuevo, que se incluya", aseveró para acto seguido admitir que Caballero "no va a recoger ese guante".

Mouriño, que compareció durante una hora y respondió a las preguntas que los aficionados le hicieron a través de las redes sociales, culpó directamente de la marcha del club al alcalde de la ciudad. "No seré yo quien le diga cómo llevar el Concello, que no me diga él cómo llevar al Celta", dijo el presidente celeste, que culpó al alcalde de "no dejar crecer" al club.

Al respecto de la concesión administrativa ofrecida por el Concello de Vigo sobre el estadio, Mouriño se mostró visiblemente molesto ya que, dijo, antes de que fuese anunciada esa posibilidad él ya la había rechazado en una reunión "muy seria" que mantuvo con Caballero.

En su intervención, recordó la campaña que llevó a cabo desde el pasado mes de diciembre para explicar a la ciudadanía los objetivos para el futuro del Celta que pasa por que éste amplíe su patrimonio y tras ser preguntado al respecto de la posibilidad de vender al club, aseguró que ya renunció a la oferta que tenía sobre la mesa -como ya anunció- y que seguirá "trabajando por un proyecto hasta que tenga fuerzas, pero lo que pase después no lo sé".