La nueva terminal de cruceros de Lisboa, puerto aliado en este tráfico con el Vigo, entrará en funcionamiento el próximo mayo "como muy tarde". La ministra del Mar, Ana Paula Vitorino, realizó este anuncio en su presentación de la infraestructura de Santa Apolónia junto a la presidente de la Administração do Porto de Lisboa -el organismo equivalente en España a la Autoridad Portuaria-, Lídia Sequeira.
Vitorino aprovechó el acto para ensalzar las buenas previsiones que maneja su Gobierno en materia de cruceros. "Esperamos un crecimiento acentuado del volumen total de pasajeros transportados", explicó de manera que cifra el aumento de cruceristas dentro de diez años con respecto al actual ejercicio "en un 55%".
Con 13.800 metros cuadrados, la nueva terminal de trasatlánticos lisboeta tiene capacidad para 800.000 pasajeros al año, 300.000 más que la actual. Su línea de atraque mide 1.490 metros, lo que permitiría el atraque simultáneo de hasta cuatro buques de gran porte. Además cuenta con estacionamiento para 80 autobuses.
En su intervención, Lídia Sequeira resaltó las "interesantes características arquitectónicas" del edificio todavía en construcción, que lo hace "moderno y eficiente. La inversión -privada al correr por cuenta de la concesionaria de la terminal- asciende a 22,7 millones de euros, cifra que minimizó la responsable portuaria al compararla con los "efectos directos, indirectos e inducidos" que tendrá para la economía local y nacional, de "100 millones de euros hasta 2020".
