Y es que aunque principalmente los equipos psicosociales se vinculen a asuntos de familia, los expedientes de juzgados de violencia de género o penales superan en número a la valoración de custodias o regímenes de visitas. Además, los casos remitidos desde las salas de violencia o penal tiene prioridad sobre los asuntos civiles especialmente desde la entrada en vigor de la nueva Ley de Enjuiciamiento Criminal y en el recorte de los tiempos de instrucción.

"A día de hoy nos cuesta llegar a los plazos de la instrucción y es necesario pedir la prorrogar para que podamos entregar los informes a tiempo. Necesitamos más ayuda porque son causas urgentes y tienen que estar para un determinado plazo de tiempo", explica una miembro del equipo psicosocial de Vigo, quien relata que, en los casos que les llegan de las salas especialistas en malos tratos, tienen que entrevistarse tanto con la mujer como con los menores, lo que alarga la tramitación.