La excursión a las instalaciones de la ETEA, en Teis, organizada dentro de las rutas de Vigo Pesqueiro y guiada por los socios de Marinetea fue seguida por 35 personas que obligaron a formar dos grupos que conocieron los entresijos del nacimiento, el desarrollo a lo largo de casi un siglo y la situación actual de la antigua Escuela de Transmisiones y Electrónica de la Armada.

Abandonada desde que en el año 2002 se trasladó la escuela a Ferrol -incluyendo una imagen de la Virgen y un crucero- y el Ministerio de Defensa las vendió a Zona Franca por 30 millones de euros, las instalaciones de la ETEA permanecen vacías a la espera de que los diferentes proyectos que se barajan para reutilizar sus edificios, -el último, una residencia de mayores de la Xunta anunciada esta semana- fructifiquen.

La ETEA surgió en 1916 como la Base Naval de Ríos, con 27 personas almacenando armamento para la lucha submarina y llegó a albergar 700 minas y ocho torpedos. Los guías de Marinetea, que contaron numerosas anécdotas de su paso por esta escuela, también mostraron el museo que existe en las instalaciones, con diferentes uniformes, metopas y artefactos que se emplearon durante esos años, entre los que se incluyen una mina antisubmarinos o un torpedo. El objetivo de la asociación, explicaron, es lograr autorización de la Xunta para habilitar un museo mayor en el antiguo edificio de la Enfermería y para ello intentarán recuperar los objetos que fueron trasladados a Ferrol y que ocupan una sala de su museo naval.

Las rutas de Vigo Pesqueiro, que organiza Fundamar, continuarán en marzo con visitas a un barco pesquero (día 4), el Museo Salinae (día 11), al buque oceanográfico Ramón Margalef, del IEO (día 14), un vivero de mariscos (día 18), una empresa de suministro a buques, Entrepot (día 23) y al museo Anfaco de la industria conservera (día 29).