Un incendio provocado por un sobrecalentamiento de una regleta a la que estaban conectados un teléfono móvil, una tablet y un aparato de música, y el posterior estallido de dos desodorantes que derivó en una deflagración, provocaron ayer aparatosos daños en una vivienda del camiño Casmarcelo de Beade donde reside un mujer de 28 años, su marido y la madre de ella. El fuego y la explosión se produjeron en la habitación del matrimonio. "Se cayeron dos paredes enteras y otra está dañada; mientras esto no se arregle no podremos vivir aquí, nos iremos a la casa de mi hermano", lamentaba la joven. Pese a la aparatosidad del siniestro, no hubo heridos.

Ocurrió poco antes de las 14.15 horas. Cuando llegaron los bomberos de Balaídos, el fuego, que se concentró en la habitación del matrimonio donde se originó, había sido sofocado. Los desodorantes estaban en el suelo y en una mesita. El estallido derrumbó tres tabiques e hizo un boquete en el techo, tiró efectos y rompió cristales, además de los daños por el pequeño incendio. También acudió la Policía Local.

Por su parte, en la bolera de Samil se registró un conato de incendio al derretirse un convertidor situado en el cuadro de la luz. La humareda obligó al desalojo de sus empleados.