Ethel Vázquez defendió en su visita a Vigo las gestiones de la Xunta para sacar adelante el proyecto de la intermodal y explicó que este último año se había "avanzado mucho" hasta lograr un proyecto básico para la terminal de autobuses, que debe ejecutar la Consellería de Infraestructuras, y un proyecto básico del Centro Vialia que Adif dejará en manos de un operador privado. El diseño de la estación de autobuses contempla una ejecución en dos fases puesto que durante un primer año deberá convivir todavía con la estación provisional de Urzáiz que opera en la actualidad.

Así lo explicó la arquitecta Lorena Pardiñas, que señaló que inicialmente operarían 19 dársenas más siete de regulación manteniendo en esta primera fase los accesos en exclusiva a través de Lepanto y que sería en un segundo ciclo cuando la estación de autobuses se expandiría hasta alcanzar las 22 dársenas más ocho de regulación y se le daría un acceso directo a través de la AP-9 con el Centro Vialia ya ejecutado. Sobre el terreno, señaló que el acceso a las dársenas se realizaría a la misma cota que la estación del AVE y que en la planta baja del edificio se ubicarían todos los servicios y una entrada directa que la comunique con la estación de tren. La conselleira insistió en que la intermodalidad "es el transporte del futuro y los vigueses no pueden perder este tren".