La iglesia románica más antigua de Vigo, Santa María de Castrelos, celebró el año pasado su octavo centenario y, entre las actividades organizadas para celebrar esta efeméride, el Concello ha querido poner en valor no solo al templo si no todo lo que lo rodea en las parroquias de Sárdoma y Castrelos.
Lo hace a través de una ruta patrimonial, presentada ayer por el alcalde de Vigo, Abel Caballero, y la presidenta de la Diputación de Pontevedra, Carmela Silva, ante el santuario. "Esta iglesia ya estaba aquí cuando se levantaba el pórtico de la gloria. Fue clave en el desarrollo de Galicia", manifestó Caballero durante la presentación de esta iniciativa ante los medios de comunicación.
La ruta, de la que se han editado tres mil folletos que se distribuirán desde las oficinas de turismo de la ciudad y a través de las asociaciones de vecinos de la zona, incluye dos puentes medievales, un petroglifo, un cruceiro y el ineludible Pazo-Museo Quiñones de León. El tríptico es ilustrado y además de contener un plano en el que se indica el recorrido también se incluyen descripciones de los lugares de interés patrimonial que atraviesa con una pequeña descripción y su historia. También reseña la leyenda de un herrero que había en Castrelos y que fue recogida por Castelao y explica, entre otros, por qué el puente medieval de Balaídos no tiene agua ya que el cauce fue desviado en los años setenta.
"Queremos poner de relieve la parte histórica de la ciudad, su cultura y su tradición", dijo Caballero en la presentación de esta iniciativa, que describió la ruta como un "paseo desde aquí a Balaídos" y remarcó que se trata de una "gran idea" que demuestra la "sensibilidad" del Concello con el patrimonio cultural.
Así, esta ruta cultural servirá para poner en valor un patrimonio que cuenta con el máximo nivel de protección, una circunstancia que, subrayó el regidor vigués, "nos estimula en su conservación".
Además, Caballero recordó que otra iniciativa similar puesta en marcha por el gobierno local en el mismo entorno, como fue la ruta sensorial del parque de Castrelos, recibió un premio europeo entre otras distinciones.
