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Oceanógrafos por el mundo · Veinticinco aniversario de la Facultad de Ciencias del Mar

Miguel Gil Coto: "La ciencia necesita mejor organización y menos burocracia; no todo es dinero"

"El Campus del Mar abrió espacios de comunicación, pero la parte institucional es la más compleja"

Miguel Gil, en la azotea del IIM, en Bouzas. // Alba Villar

Dudaba entre "Teleco" y Ciencias del Mar, pero se decantó por esta última porque al ser de nueva creación creía que tendría más salidas profesionales. Forma parte de la primera promoción y tuvo su primer contacto con la actividad investigadora en los últimos años de carrera.

-¿Qué le animó a seguir el camino de la ciencia?

-Me gustó mucho la asignatura de Oceanografía Física y empecé a colaborar con el profesor Luis Farina Busto, que puso en marcha esta temática en Vigo cuando apenas existía nada en Galicia. Y como él tenía un proyecto de colaboración en Investigaciones Marinas-CSIC me vine con una beca e hice aquí mi tesis, que estuvo dirigida por Fariña y por los oceanógrafos del centro Fiz Fernández y Xosé Antón Álvarez Salgado. Desarrollé modelos de circulación en tres dimensiones de la Ría y me acabé decantando por esta línea de trabajo.

-Las estancias en el extranjero son inherentes a la carrera del investigador, ¿en qué centros ha trabajado?

-Después de acabar la tesis, participé en la campaña antártica 2004/05 en la base Juan Gabriel de Castilla con la Unidad de Tecnología Marina (UTM) del CSIC. En 2006 me fui a la universidad australiana de Flinders, donde trabajé durante dos años con Matthias Tomczak, uno de los mejores oceanógrafos de los años 80-90. Volví al IIM en 2009 como científico titular. Es necesario irte fuera para aprender nuevas tecnologías y metodologías. Forma parte de la tarea científica.

-También ha realizado estancias en la Universidad de Florida, en el Instituto Dom Luiz de Lisboa o en Otago, Nueva Zelanda. Además de la inversión, ¿qué echa en falta de esos sistemas de I+D en el español?

-Mejor organización, más eficiencia y menos burocracia. Parece que, además de investigar, tenemos que hacer desde contables administrativos a técnicos de impresora. Habría que cambiar la estructura y estabilizar a los científicos y también a los técnicos. Su carrera en España es un desastre. A pesar de que dependemos de ellos, lograr mantenerlos o que promocionen es una odisea y están muy mal valorados. No todo es cuestión de dinero, sino de ponernos las cosas más fáciles porque a veces el problema es la falta de organización más que otras cuestiones.

-¿Tantos obstáculos ponen en riesgo muchas vocaciones?

-Sí, por supuesto. Sobre todo, por las cuestiones económicas. A igual que la educación, la investigación debería disponer de una ley constante, sin embargo, depende en exceso de los ciclos económicos. Es fácil que te coincida una crisis a lo largo de tu carrera que te haga abandonar porque tardas 10, 15 o más años en conseguir una plaza. Y en estos momentos hay gente con mucho currículo acumulado esperando por un contrato.

-¿Confía en ver algún día el Campus del Mar en la ETEA?

-Es un proyecto perenne. A igual que la ciencia, ha sufrido los problemas de excesiva burocracia y las negociaciones por los terrenos han retrasado la presencia en la ETEA. Pero sí se han conseguido cosas y se han puesto en marcha iniciativas que nos mantienen unidos y hacen masa crítica. Nos ha abierto algunos espacios de comunicación y dado acceso a fondos, lo que también ayuda. Y el contacto con Portugal nos ha venido bastante bien. La parte más compleja es la institucional.

-Al IIM le urge la mudanza por la falta de espacio en Bouzas.

-Unos grupos están peor que otros. Como ahora somos menos la presión de espacios ha descendido un poco, pero el edificio es antiguo y la presencia en la ETEA sería un impulso para las ciencias marinas. Daría más entidad y el contacto diario con otros investigadores facilitaría unas relaciones más fluidas. Tenemos una buena masa crítica y Vigo es conocido por tener buenos centros de oceanografía y biología marina.

-¿Cómo ve a las nuevas generaciones de oceanógrafos?, ¿qué añadiría a su formación?

-He dado clases en el máster de Oceanografía durante varios años y por el IIM han pasado muchos titulados y lo hacen fenomenal. Tienen una buena formación y esto se demuestra, sobre todo, cuando salen fuera y se comparan. Las únicas diferencias están relacionadas con el manejo del inglés. Y a nivel laboral, también es diferente la consideración hacia los otros trabajadores. Las relaciones son más limpias y es más fácil defender tu postura. Respecto a la carrera, creo que debería ser más práctica. Ciencias del Mar ya lo es en comparación con otros títulos, pero debería formar a los alumnos en la exposición de trabajos y la redacción de artículos.

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