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Intervención para frenar la sangría de tráficos

La ministra de Sanidad ordena a su "dos" solicionar las trabas del PIF en el Puerto

Constata tras escuchar a los empresarios el alcance del excesivo celo inspector que provoca el desvío de mercancías a Leixões -Freire, presidente de Conxemar: "Entiende perfectamente el problema y cómo afecta a la competitividad"

De izquierda a derecha, los asistentes ayer a la reunión con la ministra de Sanidad en el Senado: Enrique López Veiga, Miguel Fidalgo, Elena Muñoz, José Luis Freire, Javier Castrodeza, Dolors Montserrat, Juan Videla Ces, Constante Freire y José Ángel Mozos. // FdV

Sanidad reacciona al clamor empresarial por las trabas en el Puesto de Inspección Fronteriza (PIF) a la importación de mercancías. A la titular del ministerio, Dolors Montserrat, le bastó ayer con escuchar a los empresarios para calibrar el alcance de un problema que desangra los tráficos del puerto de Vigo en beneficio del de Leixões. En la reunión con directivos de Conxemar en el Senado, la ministra que lleva apenas dos meses en el cargo dio un giro de 180 grados a la postura mantenida hasta ahora por su departamento. De negar las trabas en las inspecciones denunciadas por la comunidad portuaria viguesa cuando lo dirigía su predecesora, la nueva responsable ministerial asume que algo falla en la gestión de sus funcionarios en Guixar y se propone arreglarlo. Con este objetivo ordenó a su número 2, el secretario general de Sanidad y Consumo, Javier Castrodeza, que busque una solución junto con el presidente de la Autoridad Portuaria.

Fue un encuentro "productivo", como así coincidieron en definirlo la mayoría de los asistentes. A la ministra le acompañaba Javier Castrodeza. Por parte de Conxemar estaban su presidente y secretario, José Luis Freire y Constante Freire, respectivamente, y otros directivos de esta organización procedentes de Madrid (José Ángel Mozos) y de Cataluña (Juan Videla). Acudieron también el presidente del Puerto, Enrique López Veiga; la presidenta del Partido Popular en Vigo, Elena Muñoz; y el senador del PP y portavoz de Pesca en la Cámara Alta, Miguel Fidalgo, de quien partió la organización de la cita.

En la hora que duró hubo una afirmación clarificadora de la dimensión del problema que iban a exponer los empresarios. Partió de José Ángel Mozos, responsable a su vez de Serpeska, una importante compañía madrileña que abastece a Mercamadrid. "El 90% ya lo importamos por Leixões", espetó. Y no es la única firma que ya desistió de intentar introducir sus mercancías por Vigo por ese "excesivo celo" de los inspectores del PIF. Sin aludir directamente a estos funcionarios, José Luis Freire abundó ante la ministra en las trabas que se ponen en este puesto y cómo defería funcionar la ministra; "Nosotros necesitamos que la materia prima que recibimos por mar se despache lo más fácil y ágil posible para rebajar costes. De lo contrario no somos competitivos".

Como al resto, al presidente de Conxemar le llamó la atención lo informada que estaba Dolors Montserrat sobre las denuncias de los empresarios. "Entiende perfectamente el problema y cómo afecta a nuestra competitividad", aseguró. Pero más descolocados quedaron los presentes cuando la ministra tomó en el acto la decisión de encomendar la búsqueda de una solución al secretario general de Sanidad y Consumo.

Aunque en el PIF trabajan otros inspectores que no dependen de su ministerio -como los del Soivre (Economía)-, Montserrat asume que en lo concerniente a los funcionarios de Sanidad Exterior se trata de "un problema técnico" que a su juicio debe ser solventado entre su departamento y la Autoridad Portuaria. De ahí que la orden dada ayer a Javier Castrodeza fuera muy celebrada por el presidente del Puerto de Vigo, Enrique López Veiga, quien agradeció a la ministra su "buena disposición". En el mismo sentido se expresó Fidalgo. Para el senador vigués, el hecho de que Montserrat haya mantenido este encuentro con los dirigentes empresariales prueba "la importancia que da a Vigo y al PP de esta ciudad".

Un perjuicio mayor que la marcha de Maersk

  • Con el informe enviado al Puerto a mediados de diciembre, la Confederación de Empresarios de Pontevedra (CEP) reactivó la alarma sobre los efectos de la actividad del PIF en la competitividad de la terminal viguesa. En el documento elaborado por la Comisión de Puertos de la CEP se tilda de "preocupante" la incidencia de ese problema situándolo al mismo nivel que los elevados costes de la estiba como causantes del descenso generalizado de tráficos en Vigo a favor de los portugueses como el de Leixões.Como muestra de la repercusión de las trabas aduaneras en el puesto de Guixar, el análisis de la patronal aseguraba que ya había productos que "en su práctica totalidad se estaban desviando por Leixões o Lisboa". Pero en este sentido añadían que esta logística antinatura que desarrollan las empresas viguesas al introducir sus mercancías por Portugal se ha convertido en una práctica tan frecuente que, según la CEP, empresas gallegas cuentan ya con naves en la terminal lusa para almacenar sus contenedores, lo que a juicio de los autores del estudio probaría la "consolidación de la vía de entrada portuguesa en su actividad ordinaria".La estadística del Puerto de Vigo confirma las conclusiones del estudio de la patronal. A las trabas en el PIF culpa del desvío a Portugal de 57.000 toneladas de pesca congelada, un volumen equiparable a todo el que entra al año por Guixar procedente de Argentina. Estos datos sirvieron a López Veiga para afirmar rotundo que el impacto del tapón del PIF "causa más daño que la marcha de Maersk a Marín". También empaña la imagen de la terminal viguesa. Por la rigidez de los inspectores de Guixar, el puerto de Vigo figura ya en la lista negra de los exportadores de Sudáfrica y Marruecos, países de estratégico interés para el tejido empresarial vigués.

"Alta participación" en la investigación portuaria

  • Los técnicos de la consultora Eosa a la que el Puerto de Vigo encargó el estudio para identificar los problemas que sufren las empresas en el PIF iniciaron el pasado diciembre el trabajo de campo. El resultado de las primeras visitas a las sedes de las compañías es "más que satisfactorio" y con una "alta participación" de los entrevistados, destacan desde la Autoridad Portuaria.En estos encuentros se les pide a los directivos que mejor conocen los entresijos del movimiento de mercancías -por suministrar la materia prima para la producción en sus plantas o porque se dedican a la gestión administrativa de los contenedores- que respondan a un amplio cuestionario. La relación de preguntas ha sido configurada por Eosa con la supervisión personal del presidente del Puerto. Enrique López Veiga quería que la información facilitada por los afectados reflejase toda la tipología de inconvenientes que se han encontrado a la hora de tratar con los inspectores del PIF y con el mayor grado de detalle.El anonimato, decisivoEl anonimato ha actuado como factor decisivo para que los empresarios se animasen a participar en esta investigación. La ocultación de su identidad siempre estuvo asegurada, algunos se resistían a describir cuestiones internas de su empresa. De ahí el llamamiento de Enrique López Veiga en diciembre reclamando a la directiva de Conxemar que instase a sus afiliados a colaborar con los encuestadores de Eosa. Un petición pública que al parecer ha surtido efecto."Están colaborando", afirma el dirigente portuario. La información recabada permitirá radiografiar toda la problemática que rodea al PIF. López Veiga valora la participación de las empresas "porque por mucho que yo denuncie que hay un problema nunca se podrá solucionar si los afectados se quedan callados", razona. Completado el informe, el siguiente paso será utilizarlo como herramienta para justificar ante las más altas instancias la necesidad de una intervención como la que decidió ayer la ministra de Sanidad.

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