La pintura no solo sirve para que los amantes de esta disciplina almacenen cuadros en sus viviendas sino que busca explotar las emociones de todos aquellos que depositan su mirada sobre los lienzos que recorren semana a semana las galerías más conocidas de los cinco continentes. Varias de ellas están en Nueva York. El pintor vigués Franck Sastre expone a partir de este jueves 20 de sus obras en Agora Gallery, un lugar en el que se dan cita algunos de los artistas de contemporáneos más reconocidos en el mundo.
"Es el segundo año que expongo aquí y para mi supone un gran honor que una de las galerías más importantes de los Estados Unidos quiera contar con mis trabajos" , comenta Sastre, quien añade que "siempre me queda la pena de no tener tanta presencia en mi país porque soy capaz de estar en Londres o Nueva York y no en Madrid".
Artista desde la infancia, el trabajo de su padre, natural de la parroquia de Matamá, hizo que naciese en Francia, aunque desde hace más de dos décadas reside con su familia en la ciudad olívica. "Todas mis obras están hechas en Vigo y es indudable el influjo que la ciudad tiene en mis creaciones" , comenta el pintor. Es habitual observarle dar largos paseos por algunos de los lugares más emblemáticos de la urbe viguesa mientras piensa en nuevas ideas para sus cuadros. "El Puerto de Vigo, el barrio de Bouzas, las calles del Casco Vello? todo me inspira en esta ciudad", señala Sastre.
Descubierto casi por casualidad por Angela Di Bello, una de las críticas de arte contemporáneo más conocidas en el mundo, Sastre ya ha expuesto en dos ocasiones en Nueva York y apura su salto a Santa Bárbara el próximo verano. "Ángela me vio por primera vez en una exposición en Portugal. Hasta allí se acercó una chica que trabajaba para ella y al cabo de unas semanas recibí un correo para que expusiese en Nueva York", indica el artista olívico.
La cita en la Gran Manzana lleva como nombre 'Reinos enigmáticos', una muestra de ocho artistas contemporáneos que sostienen un espejo frente a las personas y lugares que les rodean. Sastre pinta al óleo, acrílicos y en tinta en lienzo, madera, cartón y el cartón bordo, dando como resultado obras que añaden una fuerte presencia física a su particular estilo.
Una de sus coleccionas más exitosas tuvo a FARO como protagonista. Diez páginas del decano sirvieron de soporte para otras tantas obras que vieron la luz en una exposición en Portugal. "Las páginas de la sección cultural son perfectas para lo que yo intento transmitir con mis pinturas, por lo que la mezcla fue perfecta", comenta Sastre, quien añade que "además he vendido el 90% de esa colección, que tuvo una gran aceptación entre el público gallego y portugués".
