El presidente del PPdeG y de la Xunta cerró ayer el congreso del PP de Vigo. Alberto Núñez Feijóo llegó para respaldar a Elena Muñoz como nueva presidenta local menos de dos años después de elegirla como candidata a la Alcaldía para medirse en la difícil plaza viguesa a Abel Caballero. Durante esta campaña interna con Javier Guerra enfrente se evidenciaron las diferencias de opinión dentro de la militancia en la ciudad, pero una vez conocido el resultado el líder popular insistió en cerrar filas con la nueva responsable. "No ganó el aparato, ganó alguien que dio un paso al frente porque quiere trabajar por el partido", defendió Feijóo, que considera que de este congreso sale "un PP ganador para un Vigo ganador".
"Es responsabilidad de todos, pero sobre todo de Elena y de Javier, que el partido se una más que nunca y que toda esa fuerza se ponga a disposición de los vigueses", animó el presidente de los populares gallegos llamando a la responsabilidad a todos los implicados. "En política hay que saber ganar y saber perder, y a los que pierden congresos y aceptan el resultado les debemos nuestra democracia interna", destacó en una intervención en la que insistió en que del congreso "sale un partido relanzado cuyo objetivo debe ser convertirse en el partido que más se parece a Vigo".
Feijóo insistió en que del resultado de ayer "nadie salió derrotado" y que, sin embargo, deja "dos ganadores": "El partido, porque lo hemos visto motivado, participativo y siendo un referente, y la ciudad, porque se beneficiará de ello", concluyó antes de dejar un mensaje para el alcalde vigués: "En política sobran el ego y los personalismos, y en Vigo de forma especial", destacó el líder popular, que continuó defendiendo que ser vigués implica "respeto, educación, mesura y cumplimiento de la palabra dada", recordando las críticas de esta semana del delegado de la Xunta al alcalde de Vigo por no integrar hasta ahora el transporte urbano en el plan metropolitano.
Feijóo situó como los únicos "derrotados" por este proceso de "movilización interna" el "pesimismo" y "la gran mentira de que en este partido no se pueden hacer congresos o no hay democracia interna". Respecto al futuro en la ciudad viguesa, donde el 25-S se logró menos respaldo que en el resto de urbes gallegas, Feijóo instó al nuevo equipo de Muñoz a "trabajar para merecer la confianza de la ciudad y ganar las elecciones de 2019", señalando que quedan dos años y medio que considera "tiempo suficiente" para que una "nueva generación" tome las riendas y apueste por la renovación.
Justo antes había sido el turno de la presidenta del Congreso, Ana Pastor, que coincidió en la idea de que "el PP de Vigo es hoy más fuerte. Somos todos una familia que va a luchar por construir una alternativa de gobierno para que Vigo siga avanzando". La popular defendió el trabajo de los gobiernos de su partido y centró sus críticas en Abel Caballero. "En el PP vamos a seguir luchando para que Vigo tenga todo lo que se merece. Los vigueses se mueven hoy en AVE a Santiago y A Coruña y tienen una depuradora gracias a la gestión de gobiernos del PP", defendió la pontevedresa.
En su intervención, destacó que "la gente necesita infraestructuras y calidad de vida, y eso se logra generando las condiciones propicias y no colocando losetas y farolas", en alusión a la apuesta del Concello por las humanizaciones. Pastor pidió al alcalde de Vigo "que no busque excusas de mal pagador cuando las cosas salen mal" y contrapuso esta actitud con un PP "que busca soluciones a los problemas". Recordó también la condición de pontevedrés de Mariano Rajoy, del que aseguró que "tiene a Galicia siempre entre sus prioridades".
A fijar las prioridades de futuro de la formación olívica también contribuyó el presidente provincial, Alfonso Rueda, que situó la Alcaldía como objetivo para el equipo de Muñoz en 2019 y celebró la apertura de "una nueva etapa que aprenda de los errores y recoja todo lo bueno del pasado para lograr un partido unido y más fuerte". A la nueva ejecutiva local les advirtió de que tienen dos años y medio "para demostrar que con la confrontación que aplican otros en esta ciudad no se va adelante".
