Gonzalo Fernández, paciente del Hospital Álvaro Cunqueiro transplantado de médula que pudo reencontrarse con sus dos hijos gracias a la ayuda inesperada de un operario de grúa, ha querido mostrar hoy su agradecimiento por las muestras de apoyo recibidas.

FARO se hacía ayer eco de la noticia, que superó las 120.000 visitas, y que recogía el emocionante encuentro de un padre que lleva más de 40 días en aislamiento con sus dos hijos, Gonzalo y Daniela. Los niños, acompañados de su tía Viviana, pudieron subir en una grúa por la fachada del Cunqueiro para casi sentir sus manos, al otro lado del cristal. Una gran historia que se extendió rápidamente por las redes sociales y ha propiciado una lluvia de apoyos al protagonista que carga a su espalda con kilos de medicamentos y largas horas de quimioterapia para vencer la batalla a la leucemia que padece. Y en esa lucha, aún suma otra, por las donaciones, para la que recoge firmas en su página de Facebook Keep calm and dona médula. Desde el Cunqueiro, el guerrero de la habitación de aislamiento sigue al pie del cañón.