A falta de varias semanas para que concluya 2016, el Juzgado de Violencia sobre la Mujer de Vigo, aunque por poco, ya supera el número de casos de todo 2015. Desde el 1 de enero y hasta ayer registró 1.258 asuntos: una media de 114 cada mes. Y varias causas destacan por su gravedad, motivo por el que la juez mantiene a 13 presuntos maltratadores en prisión provisional, la cifra más alta desde que se creó la sala. Dos de ellos son los acusados de los crímenes que se instruyen, casos próximos a ser elevados a la Audiencia viguesa para la celebración del juicio con jurado popular: las víctimas son la mujer asesinada en septiembre del pasado año en López de Neira y a la que, semanas después, su marido presuntamente arrojó por la ventana en O Calvario. También continúa en investigación el asunto del celador que supuestamente acuchilló en abril de 2015 a su expareja, con la que trabajaba en el Hospital Povisa, en el cuello: sigue encarcelado y la vista oral aún se demorará al estar pendiente el informe sanitario sobre las graves lesiones y secuelas que sufrió la víctima.
La violencia machista no cesa y buena prueba de ello son las estadísticas del juzgado. En lo que va de año ya suman 1124 asuntos penales y 134 civiles, un total de 1.258 que, finalizado el año, superarán ligeramente a los de 2015. "La carga de trabajo es muy elevada", afirma la juez, que destaca que 13 de los presuntos maltratadores a los que investiga están en prisión provisional, que es la medida cautelar más grave en esta fase de instrucción. La mayoría por casos de 2015. Entre los acusados encarcelados se encuentran los supuestos autores de los dos crímenes próximos a juicio, así como el celador que trató de matar a su excompañera -la medida privativa de libertad fue confirmada por la Audiencia-, el colombiano acusado de retener y violar a su mujer y a su hija menor de edad o el millonario portugués que, en este caso este 2016, atacó presuntamente a su joven esposa en un hotel de Vigo: la instrucción prosigue y este mismo diciembre declararán en el tribunal varios testigos de la causa.
Con relación a los asesinatos, el que se sigue contra Diego Pedrido por el crimen de López de Neira está a la espera, antes de ser elevado a la Audiencia, de un recurso presentado por la Fiscalía, que solicita varias diligencias para aclarar cuestiones del informe forense, que concluyó que la víctima murió tras ser estrangulada y recibir patadas en zona craneal y facial. La fiscal quiere que los forenses aclaren si la capacidad de defensa de la mujer quedó anulada, si el agresor "aumentó innecesariamente" el daño y que se analicen restos de ADN de varón hallados en las uñas de la mano derecha de la víctima.
