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Una vida tejida con el mejor retal vigués

Fallece Lidia Moreira, dueña de Retales Lidia, uno de los negocios más carismáticos de Vigo

Lidia Moreira junto a su nieta Lidia, en una foto reciente. // FdV

¿Qué simboliza mejor a una ciudad? Pueden ser sus barrios, sus esculturas, personajes de renombre o, porque no, un carismático negocio erigido por una encomiable trabajadora. Hablar de Vigo es hablar también de Retales Lidia, que a pocos años de sus bodas de oro, ha tenido que despedir a la que fue su fundadora: Lidia Moreira Coto. "Vendía telas como podía vender zapatillas. Trabajó toda su vida por abrir y mantener su propia tienda, se fue con todos sus sueños cumplidos", cuenta Jorge Farrapeira, uno de sus hijos y también discípulo ya que heredó de su madre su pasión por los retales. "Tanto yo como mis otros tres hermanos hemos seguido con el negocio, no por comodidad, sino por su insistencias. Nos pasábamos los días en la tienda y al final le acabas cogiendo cariño y aquí estamos ahora, con tres locales en Vigo y otro más, que actúa como almacén, en Arbo", añade el hijo de Lidia Moreira.

Aunque el paso de los años le ha sentado de maravilla a esta empresa familiar, los comienzos no fueron tan idílicos. Lidia Moreira era costurera y trabajaba para la antigua fábrica de camisas Regojo, situada en Redondela. Al cierre de éste, su vena emprendedora vibró más que nunca y decidió montar su propio negocio en un pequeño local de las Galerías Rosalía de Castro al que llamaría inicialmente Confecciones Lidia. Natural de Salceda pero con gran arraigo a la ciudad olívica y un olfato fino para el negocio, vio que la venta de camisas y demás prendas no era lo que esperaba. "La crisis que llegó en los 80 junto a que en Vigo siempre hubo muy buenas modistas, hizo que la tienda pegase un bajón importante. Pero mi madre no se rindió, así que apostó por los retales". Y no se equivocó. Esta reinvención de su local le permitió además se seguir viviendo de sus retales, viajar por el territorio nacional. "Visitó Barcelona, Valencia, Alicante?en busca de las mejores telas, llevaba el trabajo por encima de todo", señala Jorge Farrapeira.

Reconoce Farrapeira que la familia ha sido el mejor ingrediente para la viabilidad de esta empresa viguesa. "Todos hemos echado una mano en la tienda. Mis hermanos y yo ya desde pequeños nos introdujo en este mundo y también mi padre.A este negocio le queda mucha vida", sentencia.

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