| El grafitero Antony trabajaba ayer en los últimos detalles de un nuevo mural que adorna una de las paredes de la gasolinera de Coia. En esta ocasión la obra fue encargada por los dueños del negocio que, hartos de las pintadas que dejaban los vándalos en el muro, optaron por encargar el trabajo a un profesional para adecentar la zona. Son brasileños así que eligieron una panorámica de Río de Janeiro que ha dado vida a un muro hasta ahora maltratado. De forma progresiva, la iniciativa privada se suma a la campaña de medianeras del Concello.