| La estatua de Manuel Castro ha sido reparada tras el enésimo ataque que sufrió en septiembre por los vándalos. La figura, que había perdido el dedo con el que el carismático repartidor de FARO hacía el característico malabar con un ejemplar del periódico, fue restituida tras los trabajos pertinentes. Desde ayer la escultura vuelve a lucir en la calle Príncipe.