La Gerencia Municipal de Urbanismo aprobará mañana el proyecto presentado por los empresarios del polígono de Miraflores, en Sárdoma, para construir una senda fluvial junto al Río Lagares. El paseo tendrá una longitud de 550 metros desde la Estrada de Moledo hasta conectar con el tramo ya acondicionado tras el núcleo industrial.
Los empresarios realizarán obras de mejora de saneamiento y asumirán la construcción de la senda. Ahora los peatones y ciclistas tienen que pasar por el vial interior cercano al río al no haber allí paseo, y comparten espacio con coches y peatones, lo que supone un riesgo para su seguridad. El sendero estará fabricado en zahorra y contará con pasarelas fabricadas en madera. La inversión asciende a 84.500 euros, según figura en la resolución que aprobará la Gerencia municipal.
El plan cuenta desde hace meses con autorización de Augas de Galicia y ahora ha recibido todos los informes pendientes de distintos departamentos del Concello. Con carácter previo a la obra los promotores deberán realizar el replanteo del trazado del colector del margen del río junto con técnicos de la concesionaria Aqualia.
Además, la Gerencia de Urbanismo ampliará la autorización de obras para la senda del Lagares que ejecutan los comuneros de Cabral en un tramo de 5,4 kilómetros dentro de la parroquia. Varias actuaciones, entre ellas el tendido de tres puentes, habían quedado en suspenso a la espera del visto bueno de Augas y de la Dirección Xeral de Patrimonio Cultural.
La senda parte desde Lagoa de Mol y llega hasta el cruce con la calle Manuel Álvarez. Su longitud es de 5,4 kilómetros y su anchura, de dos metros. El presupuesto alcanza los 1,15 millones de euros. Tendrá pavimento de jabre y la obra incluye la colocación de pasarelas de madera, postes de señalización, paneles informativos, fuentes y papeleras.
Los comuneros llegaron a iniciarla hace dos años pero fue paralizada por la falta de permisos. En aquel momento solo disponían de una autorización de Augas de Galicia. Tras los sucesivos informes favorables el Concello le otorgó licencia a finales de junio, y ahora se completa la autorización con la parte de las obras en suspenso.
