El niño más célebre de las letras gallegas ocupa ya el espacio que se merece en el corazón del casco urbano. Una escultura de granito de Balbino, el protagonista de la célebre novela Memorias dun neno labrego, se alza desde ayer ante la biblioteca de la calle Martínez Garrido que lleva el nombre de su creador: el escritor Xosé Neira Vilas, quien fallecía hace poco menos de un año en su pueblo natal, Vila de Cruces. La figura de Balbino fue elaborada por la Escola de Canteiros da Deputación de Pontevedra gracias a un acuerdo entre ambas instituciones.
A la inauguración de la escultura a'cudieron la presidenta de la Diputación, Carmela Silva, y el alcalde de Vigo, Abel Caballero. "Balbino vino a Vigo para quedarse y estar al lado de su padre y alma creadora", apuntó el regidor.
Al acto asistieron además la sobrina del literato gallego, Chus Neira, o el presidente de la Fundación Neira Vilas, Luis Reimóndez, quien destacó el valor del novelista como "escritor universal" y puso énfasis en su capacidad para tomar referencias de su propia cultura y exportarlas al resto del mundo.
La escultura mide metro y medio de alto por 40 centímetros de ancho y muestra a Balbino acompañado de su perro y con el cofre de sus secretos en las manos. El material escogido para darle forma es el granito silvestre.
