La sanidad pública inglesa conoce bien su valía. Desde hace tres años, desplaza reclutadores a la Escuela de Enfermería del Meixoeiro para fichar a recién graduadas. Algunas alumnas incluso acababan sus estudios ya con contrato. Ahora, esta relación da un salto cualitativo. La Universidad de Vigo y el hospital de Southampton han alcanzado un acuerdo pionero en España para que 11 de los 50 alumnos de último grado realicen las prácticas clínicas curriculares en sus instalaciones. La intención es que se incorporen directamente a la plantilla al terminar sus estudios.
Pondrán a prueba esta iniciativa con un proyecto piloto que comenzará en enero con el envío de los primeros 11 estudiantes. Tres responsables del hospital de Southampton se desplazan esta semana a Vigo, para conocer las instalaciones de la escuela y el Chuvi y entrevistar a los alumnos preseleccionados. El convenio se enmarca en el programa Erasmus Prácticas. "Si el proyecto tiene el éxito que esperamos, planeamos aumentar la oferta y, posiblemente, incluir las escuelas de Pontevedra", avanza uno de sus artífices, Anthony Rostron, profesor de inglés técnico en la escuela del Meixoeiro y coordinador de movilidad estudiantil.
Rostron explica que existen acuerdos parecidos entre facultades, pero este es el primero entre un hospital británico y una universidad española para alumnas de Enfermería. "Las ciencias de la salud siempre han tenido muchos más problemas para alcanzar este tipo de intercambio por tratar con pacientes", aclara. Cuenta que lograrlo "ha llevado un año de trabajo duro" y destaca que el de Southampton es "uno de los principales hospitales públicos" de Inglaterra.
El centro británico les dará la formación "completamente gratis y con un estricto control" desde la escuela viguesa. Las alumnas recibirán una beca de la universidad y ayuda con el alojamiento en Inglaterra. El curriculum se ha modificado para adaptarlo al convenio. La beca consiste en seis meses de prácticas clínicas que prevén que se pueda prolongar otros cuatro más para realizar también allí el trabajo fin de grado, aunque tutelado desde el Meixoeiro. Anthony Rostron explica que realizando ambas cosas en Inglaterra y en inglés cabe la posibilidad de que las estudiantes puedan evitar el "durísimo" examen para acreditar el nivel de inglés requerido -C1 en el International English Language Testing System- para colegiarse en su consejo de enfermeras y matronas -Nursing and Midwifery Council-, requisito obligatorio para trabajar en su sistema nacional de salud.
Esperan que, con esto, "gran parte de la escuela" tenga "trabajo permanente en el sector público en Inglaterra, nada más acabar los estudios". Y es que las once estudiantes que se beneficiarán de la beca representan algo más de la quinta parte de las alumnas de último cursos de la escuela.
Anteriores promociones de la escuela del Meixoeiro ya colocaron a buena parte de sus graduadas en hospitales públicos del Reino Unido. Agencias de reclutamiento las ficharon para atender a pacientes en las ciudades de Leicester, Slough y Ascot, entre otras.