El parque de motos crece imparable en Vigo. Su coste y ventajas animan a cientos de vecinos a pasarse a las dos ruedas. Los datos de la Dirección General de Tráfico (DGT) y el Instituto Galego de Estatística (IGE) constatan que a lo largo de la última década el número de motocicletas censadas en la ciudad se ha disparado un 70%. Si en 2006 circulaban por las calles del municipio cerca de 14.500 motos, en agosto eran ya más de 24.500. El aumento ha sido constante a lo largo de los últimos años y sigue sin tener visos de frenarse. A día de hoy en Vigo hay medio millar más que al cierre de 2015. Las estadísticas elaboradas por la DGT confirman, de hecho, que las altas superaron a las bajas durante todos los meses.

El repunte de los vehículos de dos ruedas se debe a dos grandes factores. El primero son las ventajas de costes y circulación que ofrecen las motos. El segundo, las facilidades que en los últimos años les ha brindado el Concello y que han reforzado su atractivo.

En el casco urbano hay repartidos numerosos pasos adelantados en semáforos para motos y ciclomotores, se les permite que circulen en varios carriles bus y se han reforzado además las plazas de aparcamiento para vehículos de dos ruedas. En cuanto a los tributos, el Gobierno local ha adoptado ventajas en el pago del impuesto de circulación para las motos de hasta 125 centímetros cúbicos y plantea extender la medida al resto de cilindradas. Importante fue también la decisión adoptada por el Gobierno central en 2004 de permitir que los conductores con carné B1 y ciertos años de experiencia puedan sentarse a los mandos de una moto de 125 cc.

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Otra prueba del repunte de este tipo de vehículos es que en 2006 había 10 coches por cada moto. A día de hoy, apenas una década después esa proporción casi se ha reducido a la mitad, de tal forma que hay cinco turismos por cada motocicleta. Su presencia en la ciudad es tan fuerte que en la actualidad el 12% de los vecinos empadronados -es decir, algo más de uno de cada diez- dispone de un vehículo de dos ruedas, incluidos los 11.894 ciclomotores que según la DGT hay en Vigo.

Repunte de turismos

No solo las motos arrojan una tendencia positiva. Tras caer por efecto de la crisis y también del descenso del padrón municipal, el parque de turismos continúa recuperándose poco a poco. En agosto la Dirección General de Tráfico contabilizaba en Vigo unos 146.000, cerca de 1.300 más que a finales del año pasado y casi un millar y medio por encima de 2014, cuando se alcanzó el mínimo histórico. Los datos siguen no obstante lejos de los que registraba la ciudad hace apenas un lustro, cuando rozaba los 149.700. Las tablas publicadas por el IGE muestran que en 2008 se alcanzó el mayor dato con 157.400. La recuperación se debe a la lenta recuperación de la economía, que descongela el mercado de la automoción; y de forma muy especial al efecto del Plan Pive para la renovación de turismos.