Ahora que la antigua torre de vigilancia de la Etea se cae a pedazos por falta de mantenimiento resurge el debate sobre qué destino merece la maltrecha estructura. Retirada o recuperación, la opinión unánime entre vecinos y viandantes defiende que cualquier opción debe abordarse con urgencia ante el riesgo de que, como ya ocurrió, se desprenda alguna plancha metálica y acabe hiriendo a alguno de los usuarios del paseo marítimo de la playa de A Punta. Esta discusión ha devuelto a la actualidad el proyecto del ingeniero Ángel Colsa y el escultor Pedro Dobao de convertir la histórica atalaya militar en un icono de la Ría de Vigo.
Para Colsa y Dobao, la Etea representa una "época relevante" de la historia de la ciudad por lo que su singular torreta podría continuar como exponente de lo que significó este enclave desalojado en 2002 por los militares. Animado por el consenso vecinal que presidió en 2013 la actuación de la Consellería de Infraestructuras para transformar 7.600 m2 de este recinto en una área recreativa, proyectado por el ingeniero, este convenció al escultor para plantear un diseño que dignificase el viejo mirador envolviéndolo en un caparazón artístico.
"Planteábamos que la propia torreta formase parte del punto de vigilancia que la Cruz Roja tiene en la zona. Pero al mismo tiempo que actuase como un icono, un símbolo en la ría que recuerde la importancia histórica de lo que fue la ensenada de Ríos", resume Colsa.
El entonces responsable de la mencionada consellería recibió con buenos ojos el proyecto para el mirador. Pero la salida de Agustín Hernández de este departamento autonómico acabó sepultando la iniciativa en un cajón. Para la Asociación de Antiguos Marineros de la Etea (Marinetea) "es una lástima". Su presidente Carlos Pérez, aunque admite la necesidad de actuar sobre la torreta por cuestiones de seguridad, celebra que vuelva a debatirse sobre la posibilidad de recuperarla. "Nosotros conocíamos la propuesta artística y nos gustaba mucho. Pero se quedó en nada y no sabemos muy bien las razones", comenta.
De reactivar la iniciativa de Colsa y Dobao faltaría por concretar los detalles técnicos, funcionales y la financiación. Según el diseño original, se reforzaría la torreta "para cumplir con todas las condiciones de seguridad estructural y exteriormente se crearía una piel de escamas de chapa de bronce". A modo de faro, contaría con dos paneles traslúcidos que se iluminarían por la noche: el de color azul orientado hacia el mar, y el blanco-arena, hacia tierra. "Interiormente proponíamos un pequeño almacén para la Cruz Roja y que se reformasen las escaleras que dan acceso al mirador", apunta Colsa. Con la inclusión de todos estos aspectos, la ejecución había sido presupuestada en 200.000 euros. "Es poca inversión en comparación con su rentabilidad social", compara el ingeniero.
Ambos saben bien de lo que hablan. Ángel Colsa fue nominado al premio San Telmo del Colegio de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos por la recuperación de la pérgola de Jenaro de la Fuente y la escalinata de Blein Budiño, la cual permitió devolver la farola de Urzáiz a su ubicación original. Y en alianza con Pedro Dobao proyectaron el puente de las Angustias en Mos. En este diseño, como en el del mirador de la Etea, fusionan técnica y arte para convertir el futuro viaducto en icono de ese punto emblemático de las comunicaciones del sur de Galicia.
Vecinos de Teis: "Rehabilitarla o retirarla, pero ya"
- La llamada de atención sobre el peligro que entraña la torre de vigilancia de la Etea partió de la Asociación de Vecinos de Teis. Su secretario, Anxo Iglesias, aseguraba ayer que desconocía la existencia de la propuesta artística para recuperar la estructura. En principio no se opone a este planteamiento pero tiene claras las prioridades. "No somos contrarios a que hagan con eso un mirador, pero si no se rehabilita hay que retirarla, pero ya", razona.El portavoz del colectivo vecinal teme que el debate sobre la viabilidad de su restauración eternice la decisión y entretanto "podamos lamentar alguna desgracia". También admite cierto recelo sobre la recuperación de la torre, "porque si hasta ahora no se han preocupado de su mantenimiento tal cual está no puedo imaginarme lo que ocurriría con el mirador", razona. A su juicio, el problema "es que la Etea se encuentra en tierra de nadie". Esta asociación vecinal entiende que la conservación de la torreta "es competencia municipal como institución ejecutora del paseo marítimo ubicado a escasos metros". Por contra, el Concello apunta a la Xunta, habida cuenta de que fue la administración autonómica la encargada de convertirse la parcela contigua como espacio de ocio y parque infantil.
