La presión fiscal por habitante en Vigo es de 492 euros y se sitúa en 106 por debajo de la media nacional, que asciende a 596 euros según los datos del Ministerio de Hacienda. La cantidad que pagan los vigueses al Concello por tributos es inferior a la de A Coruña, donde la cifra es de 550 euros, Santiago (585), Pontevedra (558) y Ourense, esta última la que tiene una presión más elevada entre las ciudades gallegas con 656 euros por vecino.

A ello se une que la deuda por habitante en Vigo ha sido eliminada tras las sucesivas amortizaciones extraordinarias de préstamos bancarios. Desde 2013 Praza do Rei ha adelantado el pago de 55 millones en sucesivos acuerdos plenarios para cancelar créditos. En el presupuesto de 2017, actualmente en proceso de elaboración, no está contemplada ninguna operación de deuda, con lo que el Concello continuará con deuda cero. La Concejalía de Hacienda señala que el gasto corriente por habitante en la ciudad es de 681 euros mientras que el esfuerzo inversor suma otros 42,26. "Cada vigués recibe 723,98 euros mientras paga por impuestos 492 en un contexto de finanzas sólidas y saneadas", destacan fuentes del departamento.