Ya hay datos sobre la auditoría energética de Cangas. Son datos que el gobierno local aún tiene que estudiar y que después trasladará a la oposición. Están recién llegados al Concello de Cangas, por lo que ni muchos miembros del tripartito conocen su existencia, máxime por coincidir también su llegada con las Fiestas del Cristo.

El estudio señala un ahorro energético de hasta el 78%, tras una inversión propuesta de 3.136.129 euros. El Concello de Cangas tiene en la actualidad una factura de la luz anual que alcanza los 482.380 euros y se espera que con las medidas de eficiencia energética pase a 106.834 euros, lo que supondría un ahorro de 375.546 euros para una población de 26.000 habitantes. Los centros de mando alcanzarían la cifra de 105 y el número de luminarias, 5.620.

Pero no solo se vería reducida la factura de la luz, sino también la contaminación. Los datos de la auditoria energética de Cangas revelan que con las nuevas medidas se pasaría de la emisión de 1.592.06 toneladas de CO2 al año a 335.001.

Tras la realización de un exhaustivo análisis de campo en las instalaciones de alumbrado se concluye que la propuesta de inversión es para obtener la máxima eficiencia en alumbrado público, teniendo en cuenta determinadas premisas: inversión por cuadro para que todos cumplan el reglamento de baja tensión, inversión en un sistema de telegestión, inversión en luminarias de máxima eficiencia que cumplan los requisitos técnicos exigibles e inversión en luminarias con tecnología de gestión punto-punto que permite adecuar los niveles lumínicos al reglamento de eficiencia energética del alumbrado público.

El informe pone también de manifiesto el "regular" estado exterior e interior de los centros de mando.

Ahora el gobierno local debe estudiar los datos de esta auditoría y hacer números para ver si es factible realizar una inversión que supera los 3 millones de euros para ahorrar al año en la factura de la luz 375.546 euros. Hay varias posibilidades: se opta por acabar con este despilfarro, o bien se licita de golpe y se utiliza el ahorro para amortizar la inversión o los cambios se realizan gradualmente. Existen ayudas oficiales para este tipo de modificaciones, donde queda demostrado lo obsoleto del alumbrado público. Una inversión de tres millones de euros para un Concello como el de Cangas que está sujeto al corsé del plan de ajuste podría ser muy elevada como para hacer ese desembolso en un solo año. La idea es que el control del alumbrando eléctrico de Cangas se controle telemáticamente, que se sepa en todo momento qué bombilla necesita ser cambiada con urgencia y los motivos.

Prudencia del tripartito

La auditoría energética del Concello de Cangas es algo que el tripartito lleva de forma muy sigilosa. Quiere estudiar hasta el último dato. La inversión que hay que hacer para terminar con el despilfarro eléctrico no es baladí, de ahí que se sea prudente en todos los aspectos. Cuando acudió la empresa en julio a informar a los concejales de los primeros datos de la auditoría energética, ya hubo tensión.

En ese momento se hablaba de una inversión de dos millones de euros y que el consumo del alumbrado público era un 73% más de lo que debería, lo que suponía un derroche de 1.000 euros al día.