La influencia de la autopista del mar entre Vigo y Saint Nazaire deja sentir sus efectos en el tráfico portuario. Las estadísticas que acaba de publicar Puertos del Estado con los resultados de la primera mitad del año revelan que, entre enero y junio, los muelles de Bouzas movieron 538.302 toneladas del denominado "tráfico Ro-Ro", aquel que se compone de vehículos y mercancías transportadas por medios rodados. Es el mejor dato desde 2008 y representa un incremento del 9% con respecto al mismo período de 2015 y del 23%, con respecto a 2014. La naviera concesionaria, Suardiaz, reforzó la conexión marítima en enero del año pasado con tres frecuencias semanales y dos buques, si bien las ayudas estatales por valor de 26,8 millones de euros -23,8 millones aportados a medias por los gobiernos de España y Francia y los tres restantes del programa comunitario Marco Polo- se hicieron esperar algo más y no se aprobaron hasta diciembre de ese año.
Desde el Puerto de Vigo se resalta el efecto positivo que la ruta ha tenido para este tipo de tráfico, aunque también apostillan que no toda la carga Ro-Ro se mueve con Nantes-Saint Nazaire, en Francia. Praza da Estrela concede prioridad a la autopista del mar en la reordenación de la explanada de la terminal Ro-Ro y reserva 24.000 metros cuadrados para la carga del servicio. Prevé además que la nueva línea de atraque esté operativa a finales de este mes.
La puesta en marcha del servicio marítimo arrojó datos positivos muy pronto. En su primer año en funcionamiento hizo posible el mayor aumento de mercancía portuaria en Vigo, mientras que el volumen de movimientos de Ro-Ro, vehículos y semirremolques creció un 14,7% durante 2015. En sus propias estadísticas correspondientes a la primera mitad de 2016 Praza da Estrela también apuntaba un incremento destacado de los tráficos rodados.
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Las estadísticas que acaba de divulgar Puertos del Estado revelan por otra parte que el conjunto del tráfico portuario apenas ha experimentado variaciones con respecto al año pasado. Entre enero y junio se desplazaron 2,1 millones de toneladas, apenas un 1% menos que durante el mismo lapso de 2015. Una tendencia similar muestra la mercancía general, que a lo largo del primer semestre experimentó un ligero incremento de cerca del 1% hasta llegar a las 1,8 toneladas. Los graneles líquidos se dispararon un 56,1% durante ese período -de 20.103 pasaron a 31.387 toneladas-, uno de los mayores incrementos de todo el país; mientras los graneles sólidos bajaron de 142.783 toneladas a 102.838, lo que supone una caída del 28%.
Donde los muelles vigueses mantienen su indiscutible liderazgo es en la pesca fresca. Según los datos recabados por Puertos del Estado, durante la primera mitad del año se contabilizaron 33.549 toneladas de este tipo de mercancía, un 6,1% más que en 2015 y muy por encima de las restantes terminales de España. Con respecto a la mercancía en contenedores, el repunte fue de casi el 6% hasta llegar a los 1,4 millones de toneladas. También repuntan, en un 2%, el número de contenedores.
Puertos del Estado registra por otra parte un repunte sensible en pasajeros de cruceros, capítulo que aumentó un 16,4% entre enero y junio, hasta sumar 75.958. Son cerca de 28.500 más que los que desplazó durante ese mismo período el puerto de A Coruña. La situación es bien distinta en cuanto al número de escalas, ya que en ese apartado la terminal herculina aventaja a Vigo al contabilizar 42, un par de escalas más que en la estación olívica.
A principios de julio Praza da Estrela facilitó su relación de tráficos de la primera mitad del año, en el que se aprecian incrementos notables, como del 50% en piezas de automóvil; o del 38% en aceite de pescado y gasóleo. Evolución opuesta arrojan los materiales de construcción, con una caída del 41% en granito bruto y del 25% en pizarra. Los muebles y electrodomésticos cayeron un 40%.
